Los deberes de Red Bull para 2024: perfeccionar la perfección

Este fue el rendimiento que desarrollaron en la clasificación

Y este fue el rendimiento que desarrollaron en carrera

Verstappen fue la gran referencia a una vuelta, al ser casi 0.5% más rápido que el resto a una vuelta, y quedarse sólo en el grupo de carrera, con absolutamente insultante 0.14% en promedio, que le hacía ser la referencia en muchas carreras de la temporada. Pérez sufrió mucho más en esta fase del fin de semana, y se alejó hasta casi el 1% de Verstappen, lo que suponía un gran escollo a una vuelta que le dejaba por detrás de los Ferrari, Mercedes, Norris y de Alonso. Sin duda un gran problema que le costó muchos puntos y que fue un problema para el equipo. 

Si el rendimiento a una vuelta fue increíble con Verstappen, el de carrera ya fue otro nivel, si es que había margen para ello. Fue capaz de abrir la diferencia hasta el 0.7% con Hamilton y dejó a los Ferrari, Alonso, Norris y Alonso por encima del 0.9%, lo que le hacía completamente imparable. El paso delante de Pérez demostraba que el monoplaza era mucho mejor en la fase de carrera, y que lo sucedido a una vuelta era una simple ilusión de un coche que no sacaba lo mejor de sí mismo ahí. La receta perfecta para esta nueva dimensión de la Fórmula 1, coches que no fueran hipersónicos a una vuelta pero que fueran constantemente rápidos en la carrera.

Esta la evolución mostrada durante la temporada

En la evolución de su rendimiento queda claro que fueron los mejores durante mucha parte de la temporada, y que la distancia a la cabeza era tan reducida que se podía ver más rápido las pruebas en las que no fueron la referencia. A una vuelta se pudo ver que la imagen fue peor, y fruto de ello tuvieron algunas carreras, sobre todo basadas en sacar el máximo rendimiento al neumático por la cantidad de curvas lentas que había, caso de Azerbaiyán, Montreal, Marina Bay o la secuencia México – Brasil – Las Vegas. Pero incluso en estas pruebas, donde no fueron los mejores, su rendimiento en carrera era mucho mejor, e incluso volvían a ser la referencia, caso de Azerbaiyán, Montreal y todo el final de año. Marina Bay fue el peor momento de su temporada, que reflejó a la perfección esta falta de grip, que se redujo notablemente en la carrera.

Este rendimiento en la fase de carrera los llevó a conseguir los siguientes resultados

A una vuelta Verstappen fue siempre un protagonista en la ronda final, a la que accedió en veinte ocasiones, y las dos veces que fue eliminado, lo hizo en la segunda ronda. Pérez quedó fuera en nueve ocasiones, tres en la primera ronda y seis en la segunda. Su gran dominio en la fase de carrera se pudo ver de una manera muy clara en los resultados alcanzados. Verstappen fue capaz de conseguir 19 victorias, o lo que es lo mismo, sólo se fue sin victoria en tres ocasiones, y en dos de esas ocasiones estuvo en el podio. Sólo le faltó el trofeo de Marina Bay, un circuito totalmente opuesto a las características de su monoplaza, que no llegó ni a suponer una mancha dentro de su increíble año. Velocidad y fiabilidad combinadas al máximo exponente. Pérez sólo pudo hacerse con dos carreras en la temporada, las que tuvieron a Verstappen en el podio, y en siete ocasiones estuvo entre la segunda y tercera posición. Lo problemático para él, en su intento de alcanzar a Max, fue la secuencia de carreras que acabó entre la cuarta y quinta posición y las siete veces que estuvo completando la zona de puntos. 

Todo lo anterior trajo la siguiente evolución en la temporada

Ante esta actuación en las carreras era sencillamente imposible ser capaces de mantener el ritmo, y Red Bull nunca tuvo rivales. De hecho, fueron capaces de doblar al segundo clasificado, y en ningún momento sintieron la presencia cercana de nadie. Un año simplemente impecable, hasta el punto de resultar ser demasiado sencillo, que de repetirse podría suponer un gran daño para la categoría en términos de reducción importante del seguimiento de la categoría.

Un coche perfecto es complicado de mejorar, y lo cierto es que este monoplaza tiene pocas zonas en las que se pueda incrementar su rendimiento. El único punto podría ser la actuación a una vuelta, el encontrar el máximo grip del neumático en las tandas de clasificación, pero eso irá en detrimento de una mayor degradación en carrera, su gran punto fuerte. 

Una temporada impecable que será casi imposible de volver a repetir un año más. O debería ser imposible, porque de hacerlo perderán más de lo que ganarán. Así que nos podemos encontrar un Red Bull más accesible este año, por el bien de todo lo relacionado a la categoría y de ellos mismos, pues como vimos en el pasado, no tiene el mismo valor una temporada cerrada y competida que un año terminado en Junio. Y aunque el resultado sea el mismo, no valdrá lo mismo ser campeones con dos carreras que con diez para el final.