El calendario de 2024 no tendrá un único 'parón': al tradicional de agosto se añade el de octubre

En su momento Liberty, por boca de Stefano Domenicali, ya dijo que querían un calendario más coherente en lo relacionado con el medioambiente, es decir sin tantos saltos continentales, lo que ha obligado a que algunos Grandes Premios cambien de fechas habituales.

Se ha dado un gran paso en este sentido, al menos por lo que a flete de material se refiere, porque está claro que el personal volverá a casa entre Grandes Premios, al menos en la primera mitad de temporada.

Del comienzo pausado, reposado, con carreras cada dos semanas, a un final de máxima intensidad con dos tripletes encadenados para cerrar el año, ya con el personal muy cansado.

Refiriéndonos al GP de España en Barcelona, se retrasa aún más. No sólo eso, sino que coincide con el fin de la temporada escolar y el primer gran éxodo veraniego, así como la verbena de San Juan, amén de que debería hacer todavía más calor.

El inicio reposado es casi obligado. Sin apenas test de pretemporada –no se ha dicho explícitamente pero de nuevo deberían ser en Baréin–, pero así se da tiempo a que los equipos puedan rectificar el tiro y tener las actualizaciones o rectificaciones necesarias para cuando se inicie la temporada europea, todavía sin una diferencia insalvable –en teoría– en la clasificación del campeonato.

Contrasta este inicio reposado, asimismo, con el resto de temporada, donde salvo el ‘aislado’ GP de Canadá, dobles y triples Grandes Premios se encadenan. Y es aquí donde surge la mayor sorpresa. ¡No habrá un parón, sino dos!

Al tradicional parón de agosto, seguirá otro de finales de septiembre a finales de octubre. Entre Bélgica y Países Bajos, el primero; entre Singapur y Austin, el segundo. En este último caso, aunque parezca que no, en la práctica rompe un poco la coherencia de intentar evitar los vueltos transcontinentales, porque con un mes de por medio, el retorno del material a casa es obligado.

Dos parones que podrían ser tres si China fuera anulada de nuevo por algún motivo, lo que dejaría un mes de abril prácticamente vacío.

Muchos pensarán lo mismo del aislado GP de Canadá. Pero hay alguna razón que obliga a ello. De una parte, no puede adelantarse para que coincida con Miami, ya que en mayo todavía pueden darse heladas en Montreal. Y atrasar Miami a junio quizás es contraindicado por el calor y la temporada de huracanes atlánticos.

Habrá tres citas sabatinas: Baréin y Arabia Saudí para comenzar, lo que implica que ambas citas serán al atardecer; y Las Vegas, sabatina nocturna en Estados Unidos, pero domingo por la mañana, a primera hora, en Europa.

¿Crecerá más el calendario? Es una pregunta que muchos se hacen y, a la vista del mismo, una prueba más –o incluso dos– en octubre podrían incorporarse… aunque no creo que los equipos estén por la labor, salvo que el canon extra que pague/n esa/s prueba/s lo justifique.