Sorpresas y errores en Miami

Ha sido un día en el que era muy fácil cometer un error. De hecho, tanto Max Verstappen como Charles Leclerc –dos de los mejores clasificadores de la parrilla– han tenido sus fallos en la Q3 y ninguno de ellos ha podido cerrar una buena vuelta.

Tras los errores de los ‘cocos’ en la Q3, Sergio Pérez ha exprimido su Red Bull y ha conseguido su tercera Pole en la Fórmula 1. Digamos que esto entra dentro de lo ‘normal’, pero quizás no esperábamos ver hoy a Fernando Alonso en la segunda posición.

Si, además, tenemos en cuenta que ha sido un día complicado para Aston Martin –ha habido problemas para encontrar la configuración óptima y Lance Stroll ha caído en la Q1– y que, para más inri, el tiempo de Alonso en Q3 ha sido con neumáticos usados… suena casi a milagro que el español haya quedado a tres décimas de la Pole.

Pero éstas no han sido las únicas sorpresas. Simplemente debemos mirar hacia la cuarta posición para ver ahí a… ¡Kevin Magnussen! El danés, como en Brasil el año pasado, ha vuelto a pescar en río revuelto y ha batido a los Alpine o los Mercedes.

Los Mercedes, por cierto, han vuelto a las ‘andadas’. Si en Bakú fue George Russell quien se quedó fuera de la Q3, en este caso ha sido Lewis Hamilton quien no ha podido llegar a esa última ronda. Las actualizaciones de Imola son más que necesarias para los de Brackley.

¿Más sorpresas? Sí, hay más. Aparte de las ‘caídas’ de Hamilton en Q2 o Stroll en Q1, ¿alguien esperaba ver a los dos McLaren caer en la Q1 tras el paso adelante mostrado en Azerbaiyán? ¿Acaso alguien esperaba ver a Nyck de Vries pasar a la Q2?

Sí, todo esto ha ocurrido hoy. Tengo que admitir que no esperaba una clasificación tan bonita en un circuito tan criticado como el de Miami, pero siempre es bienvenida una sesión clasificatoria tan impredecible como ésta. Y mañana, con varios pilotos fuera de posición, podemos tener una carrera interesante.