Sólo dos jefes de equipo 'sobreviven' en los últimos años tras el cambio de Mike Krack

Aston Martin ha anunciado una gran revolución en su equipo directivo. Mike Krack, jefe de equipo desde 2022, deja su puesto a Andy Cowell con efecto inmediato. El también CEO del grupo asumirá ahora sus funciones, mientras que el luxemburgués tendrá un rol mucho más activo desde el circuito. Un cambio que, se prevé, será relevante para el futuro a corto y medio plazo. La intención del equipo es convertirse en campeón del mundo en los próximos años, y necesitaba un cambio de rumbo tras los malos resultados cosechados este 2024.

Este cambio, sin embargo, no ha hecho más que sumarse a la inestabilidad que se ha vivido en este sentido en los últimos años. El año pasado también hubo muchas novedades al respecto, provocando un aluvión de movimientos que casi se puede comparar con el mercado de pilotos. Esto demuestra que las escuderías buscan hacer las cosas bien ante el cambio de reglamento que entra en vigor el próximo año.

Sauber, que ya prepara la entrada de Audi en la F1 en 2026, también se ha puesto manos a la obra. En 2022, Frédéric Vasseur dirigía Alfa Romeo tras seis años al frente, pero se marchó para afrontar el reto más importante de su carrera en Maranello. Dicha salida provocó que McLaren anticipase el ascenso de Andrea Stella. En principio, estaba previsto que liderase la estructura de McLaren en Fórmula 1 a partir de 2026, ya que en Woking esperaban que Andreas Seidl permaneciera con ellos hasta finales del año anterior. Sin embargo, la salida de Vasseur precipitó la llegada del alemán a la futura Audi, es decir, Sauber, aunque no lo hizo como jefe de equipo, sino como director ejecutivo. 

Seidl nombró a Alessandro Alunni Bravi como representante de Alfa Romeo en Fórmula 1 en aquel momento, eliminando la figura del jefe de equipo allí. En principio, ahora deben esperar hasta la incorporación de Jonathan Wheatley cuando pueda oficializarse su llegada a partir del 1 de julio.

Aunque quizás, en términos de cambios, quien se ha llevado la palma es Alpine. La escuadra francesa necesitaba un cambio de rumbo tras los momentos convulsos que vivieron en 2023, y que pagaron en pista el año pasado. A Otmar Szafnauer –que salió del equipo casi sin previo aviso– lo sustituyó de forma interina Bruno Famin. Ahora, el puesto ya parece cubierto de forma indefinida por Oliver Oakes, que está dispuesto a liderar al equipo de la mano de Flavio Briatore.

El caso de Guenther Steiner también fue especialmente llamativo. Era uno de los más veteranos, pero dijo adiós a principios de 2024 con un sorprendente comunicado. Dejó su puesto de director del equipo y fue sustituido por Ayao Komatsu, quien ya está establecido en el cargo.

Hasta el anuncio de Haas, AlphaTauri había sido el último en cambiar de jefe de equipo con la retirada de Franz Tost al término del GP de Abu Dabi. El austriaco dijo adiós a AlphaTauri, ahora Racing Bulls, para dar paso a Laurent Mekies, quien vuelve a Faenza tras pasar por la FIA y la dirección deportiva de Ferrari.

De esta manera, sólo dos equipos mantienen al mismo líder desde finales de 2021: Red Bull y Mercedes. Christian Horner y Toto Wolff han logrado sobrevivir a la tendencia que se está viendo en los últimos años, especialmente el británico, que no tuvo un 2024 nada fácil. El estallido del caso Horner y las desavenencias internas, que se hicieron públicas en varios momentos clave de la temporada –sobre todo con Jos Verstappen e incluso Helmut Marko–, desataron rumores sobre su posible marcha. Algo que finalmente no ocurrió, por lo que se mantiene en el cargo.