Red Bull sólo tomó un 'desvío'

Podría decirse que lo de Singapur fue un ‘desvío’ del camino, o una parada en una estación de servicio para descansar y dominar el resto de la temporada. Red Bull, por una vez en todo el año, fue vulnerable y sólo pudo cosechar 14 puntos en total, pero en el viernes de Suzuka ha quedado demostrado que siguen siendo la referencia.

Lejos quedan ya todos los rumores en torno a la famosa TD018. El propio Helmut Marko dejó claro esta semana que los problemas de Singapur no se repetirían en Japón, y Max Verstappen se ha encargado de dar la razón al expiloto austriaco.

El bicampeón del mundo ha marcado los mejores tiempos en la primera y la segunda sesión de entrenamientos libres. Ya de por sí, a una vuelta se ha mostrado muy rápido… pero su mayor ‘amenaza’ es el ritmo de carrera.

Max ha salido a su tanda larga con el neumático experimental –un C2 de 2024, que puede ser parecido al medio de este Gran Premio– y su ritmo ha sido sorprendente: no sólo ha comenzado con un 1’36’’449, sino que después ha sido capaz de mantenerse ‘cómodamente’ en tiempos de 1’37’’. Su media ha sido de 1’37’’548.

Si echamos un vistazo a las tandas de sus principales rivales, están un paso por detrás.

Sergio Pérez –con medios– ha podido rodar varias vueltas en 1’37’’ y después ha caído a 1’38’’ e incluso a 1’39’’; su media ha sido de 1’38’’521.

Los Ferrari –con medios– han seguido una línea similar, con tiempos de 1’37’’ al principio y después una ‘caída’ de rendimiento. La media de Charles Leclerc es de 1’38’’143 y la de Carlos Sainz, 1’38’’675.

En cuanto a los McLaren o los Mercedes, es muy difícil comparar, ya que han salido a sus tandas largas con neumáticos blandos. Pero tampoco han hecho una media que se acerque al 1’37’’, así que Verstappen parece tener la carta ganadora de cara al domingo.

Es cierto que aún queda mucho Gran Premio por delante y en la Fórmula 1 puede pasar de todo, pero parece que Red Bull ha vuelto al buen camino en Suzuka. Lo de Singapur fue un simple ‘desliz’.