La presión aumenta en Aston Martin: "Entiendo que haya menos paciencia"

La diferencia en cuanto a rendimiento de Aston Martin entre el año pasado y este 2024 es grande. Los podios de principios de temporada en 2023 se han sustituido por las dificultades de entrar en los puntos. El AMR24 es probablemente el quinto mejor coche de la parrilla, pero tiene lejos a los cuatro de arriba. Una realidad a la que tienen que hacer frente también desde Silverstone, y de forma interna. 

El jefe de equipo de Aston Martin nunca ha ocultado, siguiendo con la filosofía del equipo, la importancia del desarrollo. Y eso genera quizás ciertas expectativas que, al menos antes del parón de verano, no se habían cumplido de forma satisfactoria. Aunque de momento, Lawrence Stroll mantiene la calma, de acuerdo con la versión de Krack. 

"Bueno, creo que hay dos aspectos", ha empezado a decir en una entrevista con Motorsport, dónde ha intentado explicar cómo lo gestiona el dueño de la escudería. "Uno es: ¿qué progresos haces en comparación con tus rivales a lo largo de los años? Ahí tienes objetivos ambiciosos y tratas de gestionarlos", ha dejado sobre la mesa. 

"Eso es algo de lo que creo que se habla y se tiene un plan, y se sabe que no se puede pasar del séptimo al primero. No es posible", ha recordado. "Necesitas 'esto y esto y esto'. Hemos visto algo de lo que necesitamos en el futuro. Ese es un punto y creo que hay una cierta dosis de realidad o realismo y también de paciencia", ha dejado caer. 

El problema llega cuando se introducen ciertas actualizaciones, pero los rivales siguen muy lejos. Es precisamente en ese punto donde la presión, a nivel interno, aumenta. Algo que el luxemburgués ha tratado de analizar. 

"Cuando vas e introduces mejoras que no ofrecen el rendimiento que deberían, entonces la presión aumenta y con razón", ha subrayado. "Creo que la percepción exterior no es errónea. La percepción desde dentro es de una gran presión porque la actualización de Imola no ofrece lo que se esperaba que ofreciera y tratar de resolver eso lo más rápido posible es ahora el objetivo. Y en ese punto, entiendo también que haya menos paciencia", ha confesado. 

"Ahora bien, Lawrence lleva mucho tiempo en este negocio. Conoce muy bien cómo funciona la Fórmula 1, sabe también que si tienes algo que no funciona hasta que tienes algo mejor, se necesita tiempo: para hacer nuevas piezas, para hacer esto, para hacer aquello... Así que creo que es una mezcla de las dos cosas. Es una situación en la que no nos gustaría estar", ha considerado sobre Stroll. 

Esa quinta posición que ocupa ahora mismo la escudería en términos de rendimiento es también en la que empezaron la temporada. Es decir, en ese aspecto no ha habido avances. Si bien han podido mantener relativamente alejados a los equipos que vienen por detrás –aunque se disputa la novena y décima plaza en condiciones normales con Alpine, RB e incluso en ocasiones con Haas–, lo cierto es que Red Bull, McLaren, Ferrari y Mercedes todavía se han quedado lejos. 

Así que Aston Martin quiere seguir con el plan establecido. Lo primero, es mantener esa quinta posición; lo segundo, mirar al futuro. Ya con su dupla de pilotos confirmada, la estructura británica ya se plantea los próximos años, cuando se incorporen al equipo figuras como Enrico Cardile o Andy Cowell. El proyecto de Lawrence Stroll es ambicioso: quiere ganar títulos. Y puede que sean esos planes los que han terminado por convencer a Adrian Newey de aterrizar en la sede de Silverstone el año que viene. O, al menos, esa es la información que llega directamente desde Italia.