La mala racha de Hamilton se tenía que cortar en Silverstone

Han pasado más de dos años y medio desde que Hamilton ganó su último Gran Premio de Fórmula 1. Fue en Arabia Saudí, en plena pelea con Max Verstappen por el título. A partir de ahí, el destino le ‘negó’ ese triunfo mientras su compañero de equipo, George Russell, ganaba en Brasil 2022 y en Austria 2024 –la semana pasada–.

Algunos se preguntaban si había sabotaje de Mercedes a Lewis Hamilton tras haber confirmado su marcha a la Scuderia Ferrari para 2025. ¡Paparruchas! Es cierto que George Russell le ha pasado por encima en clasificación en esta primera mitad de temporada, pero hablar de sabotaje es una locura… y más cuando en carrera suelen estar cerca.

Hoy, todos los de la teoría de la conspiración no podrán hablar de ella. Es más, George Russell ha tenido que abandonar por una avería mecánica y Lewis Hamilton ha sido la única baza de Mercedes. Pero había que batallar con los McLaren o el Red Bull de Max Verstappen, y Lewis Hamilton ha demostrado este domingo por qué tiene siete títulos.

Ha sido una carrera impredecible, con dos periodos de lluvia y con una enorme dificultad para acertar con la estrategia. Pero Hamilton, que conoce hasta el último rincón de este circuito, ha sabido apretar cuando ha empezado a llover y también ha acertado con el segundo pit-stop para arrebatarle el liderato a Lando Norris.

Una vez en la primera posición gracias a su talento y veteranía, Hamilton tendría que afrontar una última tanda con la presión de Lando Norris y Max Verstappen, pero no se ha amilanado ante el desafío y finalmente ha logrado su victoria número 104 –y la novena en Silverstone, que también es récord– por delante del Red Bull y el McLaren.

Sin duda, un día muy emotivo para Lewis Hamilton. Ganar en casa, después de tanto tiempo y con el aliciente de que sólo le quedan 12 carreras con el equipo que le ha dado seis títulos… a nadie le puede sorprender que se haya ‘roto’ a llorar por la radio tras cruzar la meta, por muy inusual que sea ver al piloto de Stevenage entre lágrimas.

Se trata, además, de una victoria muy importante en clave Mundial. Hamilton, a pesar de su complicado inicio de año, se pone a un punto de Russell, a ocho de Pérez y a 14 de Piastri. Mercedes, por su parte, ha recortado puntos a Ferrari o Red Bull, aunque ha cedido dos puntos ante McLaren. ¡Y todavía queda media temporada!

Último Gran Premio de Gran Bretaña con Mercedes y victoria para Lewis Hamilton. Todo dicho.