Hill advierte a Liberty: "Será difícil poner orden en la selva de la F1"

El Campeón del Mundo de Fórmula 1 de 1996, Damon Hill, conoce bien el entramado del deporte y la difícil gestión que representa poner de acuerdo a todos los equipos de la parrilla. Piloto durante la época dorada de la categoría reina del automovilismo en cuanto a la rentabilidad económica, el ahora comentarista de televisión destaca los habituales conflictos de intereses que enfrentan a las escuderías.

"Como de costumbre, es muy difícil. Es como poner orden en la selva de la Fórmula 1, todo el mundo tiene sus propias ambiciones y son gente muy, muy decidida, de modo que todos los equipos han sido siempre muy difíciles de manejar", ha declarado ante los micrófonos de Sky Sports News. De hecho, este ha sido en muchas ocasiones el motivo de la inestabilidad en el reglamento y la gestión del deporte, ya que no hay unas bases consolidadas y grandes acuerdos sobre los que evolucionar.

"La polémica de Bernie era que si una persona gestiona, entonces es sólo un "sí" o un "no" como respuesta y al final él puede tomar una decisión. Pero creo que las posiciones para hacerlo funcionar ahora está tan diversificadas que tenemos el lado técnico, en el cual Ross Brawn va a estar involucrado. Después está el lado deportivo, así que seguramente estará Ross de nuevo. También está la sección del 'marketing' que es más trabajo de Liberty y Chase Carey", ha añadido el británico, al que solo le faltaría citar a Sean Bratches, envuelto en todo el aspecto comercial.

Precisamente, el hijo del bicampeón del mundo Graham Hill considera que era en las negociaciones y las ventas donde el hasta ahora máximo responsable de la categoría destacaba con su trabajo. "Eso es en lo que Bernie era bueno. No lo era tanto a la hora de cargar con el reglamento deportivo, tal como algunos de los formatos de clasificación que sugirió y el del sistema de aspersión que en su momento pensó con toda serenidad con tal de mejorar el espectáculo. En el pasado, ha salido con ideas bastante extravagantes, pero su verdadero talento era preparar y vender lo que tenía al mejor postor", ha opinado el expiloto.

Por último, también ha querido expresar su deseo por simplificar el apartado normativo, apelando así a una competición más pura y fácil de entender como lo ha sido en el pasado. En definitiva, evitar la búsqueda de elementos externos para añadir un espectáculo infundado, ya que el verdadero núcleo atractivo de la Fórmula 1 es la propia competición al más alto nivel mundial.

"Uno de los dilemas es que siempre buscamos demasiadas artimañas para tratar de tener apoyo, cuando el atractivo del deporte es que es la cumbre del automovilismo de competición y los mejores pilotos del mundo compitiendo en las carreras más feroces a través de todo el planeta. Así que creo que la esencia del deporte es buena", ha concluido Damon Hill.