Ferrari sacrificará el rendimiento del difusor para ganar eficacia, eliminando el 'porpoising'

La idea es clara: lo que se busca es evitar el ‘rebote’ que ha vuelto a aparecer en los coches rojos. Este rebote se produce cuando ‘colapsa’ el flujo de aire bajo el coche y se pierde notable carga aerodinámica de forma repentina. Sin esta carga, la suspensión se ‘descomprime’, el coche se eleva, se vuelta a tener carga… hasta que colapsa de nuevo. Es algo que no sólo es incómodo para los pilotos sino que además resta confianza porque es imposible anticipar cuando se presenta. 

El último difusor usado por Ferrari tenía tal capacidad ‘extractora’ de aire que propiciaba este colapso, el fenómeno de ‘porposing’ que tan de cabeza llevó a Mercedes -y también a otros equipos, pero sobre todo a los de la estrella- en las dos primeras temporadas de la era ‘wingcar’.

No se trata de una ‘peora’, sino de ‘corregir’ un problema aparecido con el ‘pack aerodinámico’ estrenado en Barcelona. Se consiguió aumentar la downforce de forma importante… pero a costa de este efecto ‘colateral’. En otras palabras, la mejora ‘se paso de frenada’ y desequilibró el coche.

Con el efecto suelo se da esta paradoja. El reglaje es complicado, no basta con inclinar un ala más o menos, sino que se precisa una pieza nueva. Este es la razón por la cual, en Resistencia, Peugeot ha abandonado con concepto ‘sin ala’ del 9x8 para introducir un alerón trasero para poder equilibrar mejor el coche.

Los dos pilotos ya lo han probado en el simulador y Fred Vasseur asegura que el SF24 tiene un potencial que todavía no se ha visto en pista. Silverstone es un circuito de baja carga aerodinámica y buen drag. Veremos el resultado.