Ferrari probará los 'guardabarros' mejorados de la FIA en Fiorano para reducir el espray en lluvia

Todo ello enmarcado bajo el proyecto WWP –Wet Weather Package–, que comenzó a finales de 2022. Se diseñó para que los coches de F1 pudiesen continuar con las pruebas aún en momentos de lluvia extrema mediante una nueva especificación estándar de los guardabarros. La primera prueba, de 2023, se consideró prácticamente un fracaso, pues no se limitó de forma eficaz el spray, pero eso no quiere decir que la FIA abandonase el proyecto. De hecho, tendrá una nueva oportunidad en Fiorano, con Ferrari, de acuerdo con el medio italiano Formu1a.uno. 

"La tarea parece ser más complicada de lo esperado", explicó en aquel entonces Tombazis. ¿El motivo? Desde un punto de vista físico, el spray es complicado de gestionar, ya no sólo por el agua que levantan los F1 a su paso, sino también por el agua que se lanza directamente al aire a través de los difusores. "Todavía tenemos dudas sobre cuál es la proporción real entre la pulverización debida a los neumáticos y la generada por el difusor", completó en su explicación. 

Tombazis se ha mostrado realista al respecto: es consciente de que los guardabarros no serán los definitivos tras estas vueltas. Pero en Fiorano tienen pensado poder recoger mayor información de la que ya se tiene y determinar qué camino coger: uno nuevo, o mantener la dirección. El objetivo no es otro que llegar a 2026, momento de entrada de la nueva reglamentación, con una solución. Sobre todo si se entiende que las normas aerodinámicas que entrarán en vigor deberían ayudar a su consecución, pues el difusor contaría menos que en la generación actual de monoplazas. 

De todas maneras, no es algo 'cerrado'. Es decir, si la dirección es especialmente buena, podría llegar incluso a introducirse ya la próxima temporada. 

¿Por qué ahora lo prueba Ferrari? En principio, este nuevo test iba a llegar a finales del año pasado, pero el calendario era muy comprimido. Y ahora en mayo han encontrado un hueco 'perfecto' para hacerlo. Así que ya se ha reservado la pista de Fiorano para este jueves 9 y viernes 10. De esta manera, la escudería va a dividir las sesiones en dos. 

Un día, se probarán los apéndices aerodinámicos propuestos por la FIA con un coche de versión anterior, es decir, no será el de este año. En la otra jornada, Charles Leclerc y Carlos Sainz van a poder disfrutar de 200 kilómetros –100 cada uno– de 'filming day' para probar el nuevo paquete de actualizaciones que tiene preparado Ferrari y que se podrá mostrar públicamente ya en Imola. Esto último, por supuesto, ya con el SF-24.