Ferrari ha cometido "demasiados errores" en las dos últimas carreras, apunta Vasseur

GZ:
Los problemas de Ferrari por dentro: por eso el SF-23 no es ni carne ni pez
La carrera de Budapest, en un trazado en teoría favorable a los rojos, certificó los problemas de velocidad de un coche en el que los paquetes de actualización no llegan a afectar. Y según los observadores más atentos hay una razón precisa...
El fracaso del GP de Hungría, para los detractores de Ferrari, decretó definitivamente que el SF-23 es un auto equivocado del que es imposible extraer ese potencial que hasta la fecha solo se ha vislumbrado y manifestado en Canadá y Austria, luego el regreso a la nada, o más bien a la flagrante inconsistencia de desempeño de este auto. Pero, ¿realmente las cosas son así? ¿Y habría sido legítimo esperar más de los desarrollos? De fuentes autorizadas en el paddock, ha surgido una realidad que tiende a derivar la actual falta de resultados y sobre todo la falta de competitividad del SF-23 de elecciones anteriores a las técnicas.

SALIDA DE BINOTTO—
Elecciones que tienen que ver con la salida de Mattia Binotto, sobre todo en términos de tiempos, más que de métodos y figuras técnicas de punta como la de David Sánchez inmediatamente después del GP de Baréin. La salida de Binotto se materializó al final de la temporada, consumándose efectivamente en diciembre de 2022. Toda la dirección técnica hasta ese momento había continuado siguiendo los planes que se habían acordado a principios de verano con Binotto todavía como jefe de equipo y guía de líneas de el concepto monoplaza había sido trazado por David Sánchez, de quien también dependería el desarrollo previsto del proyecto.

EL PRIMER PAQUETE— Según los observadores, los desarrollos introducidos por el GP de España se consideran inconsistentes con el proyecto original. Sánchez había esbozado las características básicas del SF-23 que, aunque con limitaciones, seguía un hilo lógico preciso en cuanto a concepto. Ahora, ese hilo lógico parece roto y, aunque se ha ganado algo (quizás) en la degradación de los neumáticos, se ha perdido en el equilibrio y la capacidad de respuesta del automóvil. Para ser claros, este automóvil ahora no responde a los ajustes de ajuste, de hecho, es totalmente insensible a ellos. Es correcto subrayar que este es un problema que generalmente surge cuando, al introducir grandes paquetes de desarrollo, se intenta hacer coexistir dos conceptos antitéticos. Simplificando aún más, se podría decir que SF-23 ahora no es ni pez ni ave. De hecho, esto implica que no es competitivo en pistas totalmente diferentes, como en el caso de Silverstone y Budapest.

COMO FRANKENSTEIN— Analizando los macro desarrollos introducidos, partiendo de los laterales inclinados que, sin embargo, por razones obvias de la necesaria inmutabilidad del embalaje del radiador, han mantenido algunas características como un conducto residual alimentado por el conducto de derivación, según nuestras fuentes han hecho más complejo el panorama de gestión de los flujos que lamen por encima de los monoplazas, asimismo, con la adopción de un fondo muy modificado y hecho "forzado" tridimensional, es decir, caracterizado por unas discontinuidades deliberadas de su perfil, no fácilmente manejable a nivel dinámico por el régimen de suspensión, que por obvias razones de tiempo y presupuesto se mantuvo inalterado. En definitiva, parece que el SF-23, aunque en la fase de desarrollo no ha seguido caminos equivocados, sino conceptos de aclamada eficacia, no es ya más que una suerte de “Frankenstein”, donde los técnicos se esfuerzan por predecir y gestionar su comportamiento en pista.

Llevan cometiendo errores desd hace muchos años, es difícil explicar la razón para tanto fallo. Parece q se van cambiando los puestos de responsabilidad y nada, quizás el problema está en mandos intermedios o + abajo

Errores? que va, si nos olvidamos de las paradas, del bajo rendimiento del coche, lo dormidos que están los mecánicos y que Leclerc tiene que quedar delate de Carlos aunque lo tengamos que parar, no veo errores, noooo