El GP de Australia, sin invasión de pista en 2024 tras las irregularidades del año pasado

Con la sesión de domingo ya terminada, fueron varios los asistentes que pudieron acceder al trazado mientras algunos pilotos seguían en pista o de vuelta al pit-lane. Aunque el caso más 'grave' ocurrió alrededor del coche de Nico Hülkenberg, que se había quedado parado en línea de meta, se vio rodeado por decenas de personas. Estaba en la curva 2 de Albert Park tras terminar en séptima posición, pero tenía activada la luz roja intermitente como señal de advertencia. El monoplaza sufrió un fallo eléctrico nada más superar la meta. 

Inmediatamente después de ver estas imágenes, la FIA abrió una investigación. Los protocolos de seguridad no se habían seguido correctamente, y los comisarios determinaron que, aunque no ocurrió ninguna 'desgracia', sí pudo haber pasado de forma potencial.  Lo vivido sobre el trazado había sido una imprudencia, aseguraron por aquel entonces. 

Tras estos hechos, los organizadores del evento en Australia han decidido tomar cartas en el asunto y han decidido los cambios que van a presentar para este 2024. Las vallas del circuito, que se solían abrir como ocurre en otros trazados para que la afición pueda acercarse a ver la celebración del podio, permanecerán cerradas. 

De momento, sólo esta temporada, aunque no se ha confirmado si la medida se va a ampliar o no de cara a los próximos años. Habrá que esperar para saber si la tradición de acudir al podio en Australia se mantiene o si, finalmente, los hechos del año pasado van a empañar una de las celebraciones más reconocidas del calendario.