Alonso: "No hay que dejarse llevar por la primera impresión"

Alonso explica que es muy fácil comparar la situación vivida hoy con las dificultades que vivió en los test de 2015 y 2016, pero cree que es demasiado arriesgado hacer esa generalización. Su prioridad, explica, es que el equipo solvente lo ocurrido cuanto antes para así poder aprovechar al máximo el resto del test para empezar a recopilar datos con los que preparar bien el Mundial.

Los problemas de Fernando han ocurrido después justamente de la vuelta de instalación, que ha sido cuando el equipo le ha detectado una fuga de aceite en su motor. Por precaución, le han pedido que se detuviera mientras la evaluaban. Finalmente han optado por instalarle una nueva unidad, aunque ésta con unos reglajes mucho más conservadores de lo habitual.

"No es un inicio perfecto de los test, pero tenemos que concentrarnos e intentar recuperar el tiempo. Estamos decepcionados y tristes de llegar al primer día de test y no poder correr. Sabemos y somos conscientes del tiempo que hemos perdido. Tengo tres días para preparar un Campeonato. No es lo ideal, pero es así. No hay que dejarse llevar por esa primera impresión. Hay que mantener la calma. Son ocho días. Sacaremos conclusiones el octavo y ojalá sean mejores que hoy, que no estamos contentos. No hay más que podamos hacer que aprender de lo que le ha pasado al coche e intentar recuperar el tiempo en los siguientes días, ha dicho en su rueda de prensa".

"Decepcionado porque llevas tres meses trabajando en tu forma física, en el simulador, en los patrocinadores, la presentación del coche… Todo el mundo ha hecho un gran trabajo con este coche, y entonces das la vuelta de instalación y algo se rompe. Y pierdes el día", reflexionaba. "Este año el tiempo es muy importante, con la nueva normativa y los nuevos neumáticos. Tenemos que recoger mucha información en muy poco tiempo, no sólo por la parte técnica sino también por el pilotaje. Has de familiarizarte con muchas cosas que son diferentes. Tengo la suerte de tener experiencia y de adaptarme a los coches antes que el resto. También lo haré este año".

EL PROGRAMA DE TRABAJO

Fernando sólo ha dado una vuelta por la mañana. Por la tarde, ha dado 28. Aun así, el asturiano relativiza la importancia del trabajo hecho porque explica que la segunda unidad de potencia estaba configurada con unos reglajes diferentes a los habituales.

"Hoy hemos hecho 29 vueltas, pero no eran vueltas de calidad, eran vueltas de comprobación. No estábamos corriendo a plena potencia. Ahora mismo es difícil tener un ‘feeling’. Hemos tenido muchos problemas y al final hemos usado unos reglajes muy conservadores para ir ganando ritmo poco a poco, y comprobar que todos los sistemas funcionaban”, ha dicho. “No hay nada dramáticamente equivocado, pero el tema es que hay que ser más rápidos que los demás, que el objetivo es recuperar el tiempo y que el primer día no ha ido tan bien como querríamos. No hay por qué esconderlo".

"No podemos comentar nada de la unidad de potencia, porque no usábamos la ‘spec’ -versión- que debería estar en el coche. Esperemos que Honda pueda encontrar rápidamente las soluciones para esta semana y tener días más normales con Stoffel y conmigo el miércoles, y luego que la semana que viene tengamos algo mejor y más similar a lo que espero que usemos en Australia, porque ahora mismo es difícil comentar el primer día. Muchos problemas".

HA PASADO EL DÍA EN EL HOTEL

Fernando ha explicado que cuando el equipo le ha informado de cuán larga iba a ser la reparación, ha optado por irse del circuito rumbo a su hotel para entrenar físicamente.

"Me he pasado todo el día entrenando en el hotel. Cuando tuve el problema, me dijeron que iban a tardar unas horas, así que me fui al hotel a entrenar. Estuve en el gimnasio haciendo un poco de deporte para no perder el día por completo. He estado jugando al tenis toda la mañana. Luego la tribuna estaba llena cuando volví al garaje, fue emocionante. Ojalá les podamos recompensar en breve de alguna manera".

MUY PRONTO PARA CONOCER LA NUEVA FÓRMULA 1

El asturiano explica que no ha podido hacerse una idea de cómo son de pilotar los nuevos coches, aunque su primera impresión es buena.

"Cuando tienes que levantar el pie tres segundos antes de la frenada, girar mucho el volante en las curvas de derechas y no girarlo en las de izquierdas para comprobar los niveles del aceite y esas cosas, te bajas y sí que tienes una buena sensación por volver a pilotar un Fórmula 1, pero en cuanto a lo que puede dar el coche no tengo ni idea".

"La única conclusión es que los coches son bonitos, más rápidos en las curvas. Es bueno volver a esa sensación de downforce y poder llevar el coche un poco más al límite. He visto otros coche spor la pista y pintan muy bien. Estoy muy contento con eso, contento de que el deporte vaya en la dirección correcta. Me siento mal por los fans, han visto coches horribles estos últimos años".