¿Por qué ninguna mujer compite en Fórmula 1?

No podría estar más equivocada. La máxima categoría del automovilismo mundial es uno de los pocos deportes mixtos, donde hombres y mujeres pueden competir entre ellos en igualdad de condiciones. 

A pesar de ello, todos los campeones de Fórmula 1 han sido hombres. En las 73 temporadas completas que se han disputado, ninguna mujer ha ganado, ni si quiera ha conseguido subir al podio. Sólo cinco mujeres han participado en una carrera —todo intervenciones esporádicas— además, sólo Lella Lomabardi consiguió sumar medio punto en el fatídico Gran Premio de España de 1975 y la última que participó, Giovianna Amati, lo hizo hace ya más 30 años. De hecho, tan sólo diez mujeres han pilotado un monoplaza de Fórmula 1 en toda la historia de la categoría. Entonces, si sobre el papel es una competición mixta, ¿por qué ninguna piloto compite en Fórmula 1?

No es un secreto que el automovilismo es un deporte muy peculiar, donde los pilotos no sólo dependen de sí mismos para triunfar. Además, sólo hay 20 asientos en Fórmula 1. Así pues, muchos factores tienen que encajar como si fuera un puzle para que un piloto llegue al ‘Gran Circo’. 

NUEVAS OPORTUNIDADES PARA LAS MUJERES

En la actualidad, la sociedad está muy volcada en conseguir la igualdad entre hombres y mujeres, por lo que los proyectos e iniciativas para favorecer la situación de la mujer son abundantes. Una tendencia que ayuda a mejorar su posición en el automovilismo a la hora de conseguir que se apueste por ellas. 

“Ahora mismo una piloto es un producto que le puede interesar a una empresa: una mujer joven, con buena imagen, que está en posiciones delanteras… Eso a una marca le puede ayudar mucho y si invierte puede tener una buena recompensa. Entonces, igual en este momento interesa más apostar por una mujer que por un hombre, porque la mujer está teniendo más tirón”, ha afirmado la piloto valenciana Nerea Martí.

“Creo que si hubiera sido hombre no habría tenido las oportunidades que he tenido porque de primeras Praga Racing —equipo de karting— confió en mi porque me veía también como un producto. Al final los pilotos somos productos y Praga vio un producto en mí, si hubiera sido hombre quizás no habrían apostado por mí”, ha explicado Martí. 

Marta García en el Gran Premio de Gran Bretaña de las W Series 2021. 

Una visión similar tiene el expiloto de Fórmula 1 y actual piloto de SuperGT, Roberto Merhi. “Hoy en día el panorama de las mujeres en fórmulas es mucho mejor, antes no se apostaba por las mujeres. A día de hoy, creo que ellas tienen más oportunidades que los hombres. En Valencia sólo conozco chicas, Marta García, Nerea Martí… Creo que ahora mismo aquí se está apoyando más a ellas”, ha señalado.

De hecho, con el objetivo de fomentar la llegada de mujeres a las principales categorías del automovilismo se crearon las W Series, campeonato exclusivamente femenino donde las pilotos son seleccionadas por su talento, compiten en igualdad de condiciones y no pagan para disputarlo. Además, de cara a 2023, la Fórmula 1 ha creado F1 Academy, una nueva categoría de formación para mujeres, por las que sí que tendrán que pagar para tener un asiento, pero una cantidad muy inferior a la de otros campeonatos.

¿ES UNA CUESTIÓN DE FÍSICO?

Entonces, si en la actualidad cada vez hay más iniciativas para favorecer a las mujeres, ¿por qué siguen sin llegar a la Fórmula 1? ¿Es una cuestión de diferencias físicas?

Aunque a simple vista parezca que el automovilismo no es un deporte que conlleve una gran exigencia física, los pilotos tienen que estar en un alto de nivel de forma para rendir al máximo durante las carreras y soportar las demandas del monoplaza. 

“Los pilotos son deportistas que tienen todas sus capacidades desarrolladas al 100% porque esto permite que ante cualquier situación puedan reaccionar de la mejor manera posible”, ha explicado Rafa Olcina, preparador físico y responsable del Centro Especializado de Tecnificación Deportiva del Motor del Circuit Ricardo Tormo (CETDM), donde entrena Nerea Martí.

“Su entrenamiento tiene una parte general donde se desarrolla la parte aeróbica y un trabajo de fuerza muy centrado en el cuello para prevenir problemas cuando tienen un accidente. También para que puedan soportar la fuerza G. Además, realizamos un trabajo especial en la pierna izquierda, porque sólo frenan con el pie izquierdo”, ha detallado Olcina. 

Así pues, se podría pensar que, en un deporte mixto, donde la mayor parte de los participantes son hombres y en el cual el físico es un factor importante, las mujeres se ven en una posición de inferioridad debido a su condición física.

Según el estudio “Dimorfismo sexual humano” publicado por la Academia Nacional de Medicina, los hombres tienen hasta un 30% más de masa muscular y sus altos niveles de testosterona contribuyen en el desarrollo muscular. Por el contrario, las mujeres tienen mayor cantidad de tejido graso dentro de los músculos y mayores niveles de una sustancia denominada miostanina, que inhibe el desarrollo de la fibra muscular. 

Nerea Martí en el CETDM.

Esta condición la ha sufrido la piloto Belén García desde que empezó a competir. “Físicamente soy muy pequeña y me cuesta mucho ganar masa muscular, tengo que entrenar muchísimas horas. He tenido épocas en las que me costaba mucho llegar, o más bien más tiempo que a otros”, ha relatado la catalana.

Ya no es sólo la fuerza lo que influye en el pilotaje y rendimiento, sino también la adaptación al coche. García, por ejemplo, siempre ha estado por debajo del peso mínimo reglamentario en su categoría de karting, por lo que ha tenido que competir con plomo, lo que influye en el comportamiento del vehículo. 

“Hay otros factores, como el tamaño de los pedales, porque si son demasiado grandes no puedes hacer la misma fuerza porque tu pie es más pequeño”, ha asegurado Belén García. 

Quejas similares expresó en el pasado María De Villota, la piloto madrileña consideraba que los monoplazas estaban hechos para los hombres, tal y como recoge su libro “La vida es un regalo”.  De Villota explicó que el grosor de los volantes le dificultaba agarrarlos con fuerza debido al tamaño de sus manos o que los anclajes de los cinturones le oprimían el pecho.

Pero estos hándicaps tienen solución y no son un impedimento para que una mujer pilote al mismo nivel que un hombre. Por un lado, la adaptación de los monoplazas y los karts a cada piloto es una realidad hoy en día. De la misma manera que un entrenamiento adecuado permite a las pilotos tener la misma condición física que un hombre. 

“Existen diferencias físicas que distinguen la conducción de un hombre y de una mujer, pero no hay ninguna característica que les impida pilotar al mismo nivel si están bien preparados. Es cierto que tienen que trabajar más algunos aspectos, como por ejemplo la fuerza, pero lo hacen y ya está”, ha asegurado Olcina.

En definitiva, el físico es relevante en la competición tanto para hombres como para mujeres, pero la realidad es que no es un factor determinante a la hora de explicar por qué no hay mujeres en Fórmula 1. Como indica Olcina, hay aspectos más influyentes en los resultados de los deportistas.

“El físico no es una diferencia condicionante a la hora de pilotar en personas entrenadas. Pasa lo mismo que en otros deportes, como por ejemplo el tenis, ¿el más fuerte físicamente es el que gana? No, es un componente, pero el componente técnico marca mucho más la diferencia”, ha valorado el preparador físico. 

LA ESTADÍSTICA NO FALLA

Así pues, las mujeres no tienen menos posibilidades de llegar a la Fórmula 1 por el simple hecho de ser mujeres, su físico no es un determinante. Tampoco tienen menos oportunidades de patrocinio, ni mucho menos es una cuestión de talento. Para entender por qué ninguna mujer corre en el ‘Gran Circo’ y porqué tan pocas lo han hecho a lo largo de la historia, sólo hay que mirar el número de mujeres que se interesan en competir.

De entre todos los pilotos del mundo, sólo 20 corren cada año en Fórmula 1. Esto conlleva que, de todos los pilotos que empiezan en el karting, un porcentaje muy pequeño llega a ocupar un asiento en la máxima categoría del automovilismo mundial.

Sólo en España en 2021, la Real Federación de Automovilismo (RFEDA) expidió 21.610 licencias a pilotos, de las cuales el 87,47% fueron a hombres.  El 12,53% correspondió a mujeres, es decir, hubo 2.708 pilotos federadas. La relación es simple: si únicamente pueden llegar 20 pilotos a Fórmula 1 y el porcentaje de hombres que intenta hacerlo es hasta siete veces superior al de mujeres, el resultado es claro. La estadística y la probabilidad no fallan.

“No hay mujeres en Fórmula 1 porque no hay casi mujeres corriendo. Cuando yo corría en karting igual éramos tres o cuatro chicas y los otros ochenta eran chicos. Entonces, el hecho de que una mujer llegue a la Fórmula 1 se hace mucho más complicado, porque no hay la misma cantidad de mujeres que de hombres en la base”, ha afirmado la piloto Marta García.

“Hasta hace pocos años, muy pocas mujeres empezaban en el automovilismo y muy pocas destinaban todos sus recursos como lo hacen muchos hombres que intentan llegar a Fórmula 1. Es muy difícil incluso para los hombres, peros si comparas el número de hombres que lo intentan con el número de mujeres no somos nada todavía, tenemos que ser muchísimas más en el mundo. Creo que cuantas más lo intentemos, más fácil será que alguna llegue”, ha añadido Belén García.

De esta forma, la clave para revertir esta situación pasa por un aumento en el número de niñas que empiezan en el karting, el primer escalón para llegar a la categoría reina del automovilismo. Cabe destacar que en los últimos años las iniciativas para potenciar la presencia de las mujeres en el mundo del motor han aumentado de forma considerable. Reflejo de ello es el incremento de las licencias expedidas a mujeres por la Federación, un aumento del 54% en 2021 frente a 2019 —sin tener en consideración el 2020 por la pandemia de la covid-19 —.

“Cuando empecé era la única chica, pero conforme ha ido pasando el tiempo sí que he visto un cambio y cada vez se ven más chicas. Cada vez se ven más proyectos para nosotras, programas como el ‘Girls on Track’ de la FIA o las W Series van a ayudar mucho y estoy segura de que de aquí a poco tiempo vamos a tener mujeres en Fórmula 1”, ha asegurado Nerea Martí.

Está claro que ser mujer en un mundo mayoritariamente masculino no es fácil. Nerea Martí, Belén García y Marta García son sólo tres ejemplos de pilotos que luchan por llegar a la Fórmula 1, cada vez hay más iniciativas desde los diferentes organismos implicados para impulsar sus carreras, pero ¿cuál es el futuro? ¿Promover las categorías exclusivamente femeninas o crear categorías que sirvan de trampolín hasta conseguir que las mujeres lleguen a la élite?