Palou se llevará un bono de un millón de dólares si gana en un oval esta temporada

Este premio es un bonus especial para el piloto que consiga ganar en los tres tipos distintos de circuitos que conforman la IndyCar: ovales, ruteros y urbanos.  El catalán ha ganado en Detroit, trazado urbano, y ganó también el GP de Indianápolis, rutero, así que sólo le falta sólo un trazado oval. Tiene tres oportunidades para conseguirlo: el 22 o el 23 de julo en Iowa y el 27 de agosto en el World Wide Technologie Raceway, más conocido como Gateway.

Palou dejó muy claro en Indianápolis, con la Pole y remontado hasta la cuarta plaza tras sufrir un toque inicial por parte de Rinus Veekay, que ya ha aprendido el truco de los ovales.

En Detroit, primera victoria en un ‘urbano’, su dominio fue abrumador, hasta el punto de que Will Power se ‘rindió’ ante él: “este chico era demasiado rápido hoy”, dijo al terminar la carrera.

Palou dijo que “el coche estuvo perfecto y estoy superorgulloso del trabajo que hemos efectuado. Fue un poco complicado al final porque con los neumáticos ya muy gastados era difícil ponerlos en temperatura en los reinicios”.

Sin embargo, fue a media carrera cuando pasó su momento más apurado. Después de haber estado mandando en la primera parte de la prueba —sólo perdió el liderato efímeramente por la secuencia de repostajes—, cuando Will Power le superó en un reinicio en la vuelta 56. Palou abrió un poco la puerta y Power no perdonó, incluso llegó a alejarse y cobrar casi tres segundos de ventaja. “Probablemente cometí un error y quedé atrapado allí. Estoy muy orgulloso de haber podido recuperar el liderato. En realidad, fue una carrera en la que siempre estuvimos muy ocupados, pero tenía un coche muy rápido. Fuimos muy rápidos en la primera etapa de carrera y creo que hicimos la estrategia correcta para empujar. Hubiera deseado un final más tranquilo, pero ha sido un gran día para nosotros, una carrera divertida, mejor de lo que esperaba”.