Max Verstappen, en Mugello a los mandos de un Ferrari

No es que Max, que tiene contrato a largo plazo con Red Bull, haya tenido ‘conversaciones secretas’ con Ferrari, sino que ha ido allí el echar una mano a Thierry Vermeulen. Previamente había pasado por suiza, por las instalaciones de Emil Frey.

Thierry es un joven piloto neerlandés, hijo de Raymond Vermeulen, quien es manager de Max. No sólo eso, sino que Max le apoya a través de su equipo y de la publicidad Red Bull. Mientras que Jos Verstappen hace las veces de manager del joven Vermeulen.

Vermeulen ha tenido un doble programa este año, el DTM y el Fanatec GT Sprint, a los mandos de un Ferrari 299 GT3 del equipo de Emil Frey. En las carreras del Fanatec, su compañero ha sido Albert Costa, ambos han subido al podio cuatro veces y han acabado cuartos de este campeonato. En el DTM, Vermeulen ha sido 16º y tras un inicio complicado ha entrado regularmente en los puntos.

Max dijo a Blick que estaba muy contento “de pode ayudar a mi amigo Vermeulen. Somos como una gran familia y las carreras de GT me apasionan”, ha dicho Max. 

El campeón del mundo de F1 dio algunos consejos al joven piloto, cuyo objetivo no es llegar a la F1 como Max, sino que piensa más en resistencia, en llegar a un hypercar oficial.

No es la primera vez que Max le ayuda en pista. Estuvo ya en los test de pretemporada y en otro test que el piloto neerlandés hizo en mayo.