Lilou Wadoux sorprende al volante del Ferrari 499P

Prudente en la sesión matinal, Lilou mejoró notablemente por la tarde, aunque Robert Shwartzman, que se subió al mismo coche, fue un segundo más rápido. Robert, sin embargo, tenía una ventaja no desdeñable sobre la francesa, no en vano ha corrido en F2. El otro ‘rookie’ que estuvo por delante de Lilou fue Norman Nato, que tiene una sólida experiencia en LMP2.

"Simplemente he intentado aprovechar al máximo el coche. He tenido que buscar un equilibrio entre mi voluntad de estar concentrada en lo que hacía y el deseo de ir lo más rápido posible y aprovechar el momento. Treinta vueltas es muy poco, pero he podido disfrutarlas. No he atacado de forma excesiva porque no servía de nada, era sólo un ensayo. Un Hypercar es un coche complejo y hay muchos procedimientos a respetar. En cosas parece un LMP2, en otras, un GT. He tenido que adaptar mi forma de pilotaje", dijo Lilou al finalizar la jornada.

Mucha atención mediática sobre Valentino Rossi, que tomó los mandos de un Oreca del Team WRT, con el cual rodó a buen ritmo, marcando uno de los mejores cronos de la categoría, sólo superado por Clement Novalak y Charles Weerts; estos dos rodaron en 1’54”3, mientras que Valentino lo hizo en 1’55”1.

Nico Varrone se vio confiar en el Cadillac, lógico si tenemos en cuenta que era piloto de Corvette en GTE, mientras que Laurens Vanthoor y Thomas Preining se pusieron al volante de uno de los Porsche 963.