Dakar 2024: Albert Llovera, a sacarse la 'espina' del año pasado

Pero el andorrano no se rinde. Estará de nuevo en la salida este año, dispuesto a 'tomarse la revancha' con su equipo Fesh Fesh y que su camión Ford complete lo que el año pasado se negó prácticamente a comenzar. Lo hará llevando a su sobrina Margot de copiloto, como el pasado año, y a Marc Torres.

Será su noveno Dakar, cuarto en camiones. Ha acabado cuatro veces y abandonado otras tantas; este año hará el desempate y a buen seguro que desea hacerlo acabando la prueba.

"El objetivo es acabar como sea. Iremos de menos a más y ya veremos lo alto que podemos llegar en la clasificación", dice Albert. Llovera muestra siempre una sonrisa cómplice. En ocasiones parece tener un punto de locura, pero es simplemente muestra de su pasión por el motor y la velocidad; la felicidad que ello le otorga desde que un día aciago, con 18 años, una caída en una prueba del Europeo de Esquí marcó un cambio de dirección en su vida.

Desde entonces, ha afrontado la vida como un desafío vital, demostrar que una silla de ruedas no es un impedimento y que puedes afrontar cosas que ni siquiera imaginas.

Albert está mucho más tranquilo este año. Han podido probar el camión en Marruecos, afinar detalles, ver que la máquina responde. "Afronto mi novena participación en el Rally Dakar con muchísimas ganas. Estoy súper contento por poder trabajar con Ford España en este proyecto, ya que compartimos los mismos valores y actitud ante la vida", ha señalado el piloto que es embajador de Ford Trucks España.

Llovera explica que tiene una cuenta pendiente con la prueba. "El año pasado me quedó una espina clavada y ya llevo dos ediciones que han sido muy cortas. Por lo tanto, lo primero que tenemos que conseguir es completar la carrera y, de lograrlo, me gustaría hacer un top 15".

El 'invierno' –el periodo entre dos Dakar– ha sido intenso. Pasó por quirófano para que el Dr. Xavier Mir le volviera a operar el pulgar de la mano izquierda. Ha trabajado muy duro con Guidosimplex para diseñar unos mandos adaptados más eficientes y suaves; trabajos de los que más adelante podrán beneficiarse todos los conductores que tengan problemas de movilidad en sus piernas. Y visita diversos hospitales e instituciones de personas parapléjicas o con problemas de movilidad, para darles ánimo y transmitirles un mensaje ilusionante de vida.

"Por segundo año tendré a mi sobrina Margot a mi lado, que me hace mucha ilusión porque es una luchadora, está súper preparada y se lo merece como nadie. También vuelve Marc como mecánico y esto nos facilita mucho todo, ya que, además de su experiencia y de que nos parecemos mucho en cuanto al carácter, compartimos el mismo idioma y sabe leer muy bien las etapas. Lo tenemos todo listo para dar guerra en el desierto", señala convencido.

Margot Llobera –tío y sobrina discrepan en ortografía, ya se ve– llega con inmensas ganas "después de lo que nos ocurrió el año pasado. Hemos podido entrenar mucho con el camión y la puesta a punto de Albert ha sido fantástica. Fue duro abandonar tan pronto y por primera vez vi lo que significa la mala suerte en los rallies. Dolió mucho y este año hay que terminar como sea. Queremos quitarnos esa espina clavada".

Torres fue baja de última hora el pasado año y está muy agradecido a Albert: "me brinda esta segunda oportunidad. Tengo muchas ganas de volver a la cabina con él porque es la persona con la que mejor me he encontrado en todos los Dakar que he hecho. Es un luchador y se merece que yo esté 100% a su lado para ayudarlo a tener una buena posición en la general y que las cosas salgan bien. Hemos estado probando el camión en Marruecos y hemos comprobado que va muy bien".