Toyota alcanza en Portimao su centenario

Ha pasado mucho tiempo desde que la marca japonesa puso pie en el mundo de la Resistencia. Fue en 1967 cuando los Toyota 2000 GT se impusieron en la primera edición de las 24 Horas de Fuji, con un doblete, completado por un tercer puesto de un Toyota Sports 800. Desde entonces, la Resistencia –y los rallies poco más tarde– han sido los ejes fundamentales de la competición para la marca.

"Aunque siempre estamos mirando hacia el futuro, para el próximo desafío la próxima victoria y la próxima innovación técnica es satisfactorio tomar un momento y mirar hacia atrás en la historia de Toyota en las carreras de resistencia", ha destacado Hisatake Murata, presidente del equipo Toyota Gazoo Racing.

"Todos los integrantes del equipo Toyota Gazoo Racing están orgullosos de ser parte de estas 100 carreras. Este aniversario nos da la oportunidad de disfrutar de esa historia y recordar los grandes nombres, las emocionantes carreras y los grandes sacrificios que forman parte de esta fascinante historia", ha añadido Murata.

Inicialmente la marca estuvo muy cerca de ir a la Can-Am, tras la victoria en el Gran Premio de Japón del Toyota 7, equipado con un motor V8 de 5 litros y con un estilo de carrocería muy similar a McLaren de la Can-Am.

El coche había debutado en el GP de Japón de 1968 pero con motor 3 litros, resultado insuficientemente competitivo, pero ganó más adelante las 12 Horas de Suzuka y 1.000 kilómetros de Suzuka, victoria que repitió en 1969 ya con el motor de 5 litros.

Como la federación japonesa anunció que el GP de Japón de 1970 se disputaría con monoplazas, Toyota pensó en la Can-Am ya que en 1968, con ocasión de las 200 Millas de Fuji, había corrido contra varios coches Can-Am llegados desde Estados Unidos. El motor recibió apoyo de dos turbo para tener 800 caballos de potencia, pero dos accidentes mortales de pilotos probadores cancelaron el proyecto.

El desembarco en el WEC fue con los ojos puestos mayoritariamente en Le Mans. Fue en 1983, con ocasión de los 1.000 kilómetros de Fuji, que la marca irrumpió en la categoría con el Toyota 83C… aunque un año antes habían corrido las 6 Horas de Fuji con un Toyota Celica C, que acabó en quinta posición.

En aquella ocasión Toyota alineó dos 83C para Kaoru Hoshino, Keiji Matsumoto y Masanori Sekiya, que acabaron en novena posición. Mientras que Derek Daly, Geoff Lees y Toshio Suzuki no llegaron a salir tras un fuerte accidente en entrenamientos. Los ganadores fueron Stefan Bellof y Derek Bell a un Porsche 956.

Han transcurrido casi 40 años para llegar a la cuota de 100 carreras, lo que no tiene nada extraño. Hay que descontar los siete años en los que Toyota se centró en Fórmula 1 –2002-209–, y también el paréntesis entre 1994 y 1997 en el que se centró en la IMSA, para regresar en 2012 con la era híbrida.

También hay que tener en cuenta que el WEC tiene un calendario muy limitado, entre seis y diez pruebas como mucho y sólo en la era híbrida Toyota lo ha afrontado por completo… lo que explica que Sébastian Buemi haya sido el piloto con más carreras del WEC para la marca japonesa, 60, y también quien ha ganado más veces con Toyota, 18 victorias.

La marca japonesa tardó casi una década en conseguir su primer triunfo. Fue en Monza 1992, con el Toyota TS010 gracias a Geoff Lees y Histoshi Ogawa, tras una accidente del Peugeot 905 líder. Su primer podio databa de 1985 y su primera victoria en la era hybrid del WEC llegó en 2012.

La Mans, su gran objetivo, se les resistió hasta 2018, año en el que gracias a Fernando Alonso, Buemi y Kazuki Nakajima, lograron su primera victoria en la prueba francesa, después de esa que se les escapó por un problema de motor en 2016 a falta de cinco minutos para el final, 51 años después de aquella victoria de los 2000GT en Fuji, 50 años después de haber fabricado su primer sport-prototipo.

Hasta ahora, Toyota ha ganado 33 de las 99 carreras disputadas, entre ellas las tres últimas ediciones de las 24 Horas de Le Mans, en el marco del WEC y ha alcanzado 78 podios.