Toyota 2000 GT: se subasta una unidad por más de 520.000 euros

Los coches clásicos tienen algo especial. No todo el mundo lo entiende, mucha gente los ve como ‘coches viejos’ y se sorprende con las cantidades de dinero que se pagan por algunos. Y en cierto modo, esa sorpresa está más que justificada. Hemos sido testigos en los últimos años, de una subida del valor medio de mercado de auténtico disparate. Ni siquiera los amantes del automóvil llegan a comprender totalmente el motivo de semejantes tarifas.

El coche clásico y de colección se ha convertido en un objeto de inversión. Un mercado más, como puede ser el del arte, donde guardar de forma más o menos segura una alta inversión. Además, el automóvil, sobre todo si es una pieza rara, no pierde tanto valor como otras opciones. De hecho, según lo visto los últimos años, es muy posible que aumente. RM Sotheby’s nos ofrece una clara muestra de la subida de los precios – y también de su retroceso– . Durante una subasta en Arizona el pasado 18 de enero, logró alcanzar los 533.520 euros para un Toyota 2000 GT.

Silueta coupé extremadamente baja, un capó largo como un día sin pan y una cabina muy retrasada; el Toyota 2000 GT es uno de los clásicos japoneses más bonitos de la historia y también, uno de los más valorados. Su imagen desprende estilo, clase y deportividad, avalado por las 351 unidades fabricadas entre 1967 y 1970 –hay fuentes que aseguran que sólo fueron 337 unidades–, de las que actualmente sólo quedan 100. Está considerado el primer ‘supercoche japonés’ y su palmarés en competición es abrumador: tres récords en resistencia y 13 internacionales, victorias en el campeonato SCCA americano y alguna victoria en Suzuka entre otras, como las 24 Horas de Fuji de 1967.

Para cualquier entendido son motivos suficientes para otorgarle un valor especialmente alto, a lo que debemos sumar, por ejemplo, que a Europa solamente llegaron 10 unidades –otras 55 fueron a parar a tierras americanas–. Sus precios en subasta han llegado a superar el millón de euros en ocasiones muy concretas, aunque para la ocasión el afortunado comprador ‘únicamente’ ha pagado por esta unidad los mencionados 533.520 euros. Una cifra que resulta muy elevada y complicada de justificar.

Cuando el Toyota 2000 GT se puso a la venta, en 1967, costaba en Estados Unidos 1.000 dólares más que un Porsche 911 y varios miles más que un Chevrolet Corvette C2. Su motor cuenta con 2.000 centímetros cúbicos repartidos entre seis cilindros colocados en línea alimentados por carburadores Solex de doble cuerpo, que gracias a los ingenieros de Yamaha, rinde 150 caballos. Es capaz de acelerar de 0 a 100 kilómetros/hora en 10 segundos y con un peso de 1.120 kilos, ha sido elogiado por todos aquellos que han podido conducirlo, por su finura de funcionamiento y su comportamiento equilibrado.

Representa un cambio de rumbo para la industria japonesa del automóvil, que mostró el camino que se debía seguir para tener éxito. Un camino que les ha llevado colocarse como fabricantes realmente buenos, con modelos robustos, fiables y tecnológicos. Se han convertido en referentes cuando, en la época de nuestro protagonista, eran una auténtico desastre.

Por cierto, ¿sabíais que fue un proyecto de Yamaha para Nissan? Estos rechazaron el proyecto que fue aprovechado por Toyota, con un resultado que seguramente, nadie esperaría.

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