Se dispara el precio del petróleo tras el ataque a refinerías saudíes

Riad informó el sábado de ataques contra dos instalaciones de la petrolera estatal Aramco. Participaron diez drones y no hubo daños personales. Una de las instalaciones atacadas se encuentra en Abqaiq, cerca de Damman, mientras que la otra se encuentra en el yacimiento de Hijrat Jurais.

Altos cargos de Washington responsabilizan a Irán y advierten de una respuesta militar si se confirma la autoría del ataque. A la espera de que Arabia Saudí concluya sus investigaciones, la administración de Teherán ya ha negado las acusaciones de Estados Unidos, que ha atribuido a un "complot organizado por algunos servicios secretos para desprestigiar la imagen de un país".

Fruto del ataque, Arabia Saudí se ha visto obligada a interrumpir la producción de 5,7 millones de barriles diarios, que equivalen a más de la mitad de su acción diaria y a más del 5% del mercado global. El país dispone de 188 millones de barriles almacenados en sus reservas, que pueden servir para mantener las exportaciones en las próximas semanas.

Pero el mercado ya se ha resentido. El precio del barril de Brent ha registrado un aumento de hasta el 19,5%, de 60 a 71,95 dólares. El mayor aumento interdiario desde junio de 1991, cuando la guerra del Golfo.

El barril tipo West Texas, que es la referencia en Estados Unidos, ha registrado un crecimiento del 15,5% hasta situarse en los 63,34 dólares. No se registraba una subida de esta índole desde el mes de junio de 1998.

Los valores se han moderado con el paso de la sesión. El barril de Brent se queda en torno a los 66,30 dólares –crecimiento del 10,1%– y el West Texas, menos condicionado por las importaciones de Arabia Saudí, alcanza los 59,82 dólares.

Donald Trump ya ha autorizado la liberación de petróleo de la Reserva Estratégica de Estados Unidos para estabilizar el mercado del crudo, aunque todavía no ha trascendido la cantidad.

"Como consecuencia del ataque a Arabia Saudí, que puede tener un impacto en los precios del petróleo, he autorizado la liberación de petróleo de la Reserva Estratégica de Petróleo, si es necesario, en una cantidad por determinar pero suficiente para mantener los mercados bien abastecidos", ha dicho el presidente de Estados Unidos en las redes sociales.

"También he informado a todas las agencias para acelerar los trámites de los oleoductos que se encuentran actualmente en proceso de obtener permisos en Texas y en otros estados".

Dicha reserva se encuentra en las costas de Texas y Louisiana. Cuenta con cerca de 648 millones de barriles de petróleo. El ex secretario de Estado Henry Kissinger impulsó su creación en 1975, tras el embargo árabe de petróleo que elevó los precios y dañó la economía del país. La última vez que se recurrió a ella fue en 2011 cuando la crisis de Libia.

El gobierno de Corea del Sur también ha dicho que estudiará la posibilidad de liberar crudo de sus reservas si detecta que la importación de petróleo evoluciona a peor.