Una mujer sufre un accidente en Arizona y pasa seis días en su coche

Conducir un vehículo conlleva una serie de riesgos, pero en pocas ocasiones te verás envuelto en una situación como la vivida por una mujer de 53 años en Arizona hace unas semanas. Tras sufrir una salida de pista en una solitaria carretera se precipitó por un barranco unos 15 metros y quedó con su coche sobre un árbol.

Según informaron desde Estados Unidos, la mujer circulaba en un solitario y remoto tramo de la US 60, al norte de Phoenix, cuando perdió el control de su coche, se estrelló contra uno de los guardarrailes y cayó sobre un árbol. Pasaron seis días hasta que alguien la encontró después del accidente.

"El jueves 18 de octubre, un equipo de mantenimiento y un ranchero del Departamento de Transporte de Arizona (ADOT) estaban trabajando para acorralar a una vaca a lo largo de los US 60 cuando notaron una ruptura en barrera de la carretera. Cuando se pararon junto a la cerca dañada, observaron un vehículo destrozado alojado en un árbol Mezquite, a unos 50 pies de la carretera. ADOT notificó al Departamento de Seguridad Pública de Arizona (AZDPS) y se envió a una patrulla a la escena. El agente Caleb Hiegel, los miembros de la cuadrilla de mantenimiento de carreteras de ADOT Zach Moralez y Josh Miller, y el ranchero Dave Moralez registraron el auto y no localizaron a nadie. Los agentes del DPS de Arizona siguieron las huellas que salían del vehículo y encontraron a una mujer a unos 500 metros de distancia de un viejo lecho del río. Estaba gravemente deshidratada y tenía lesiones graves. Comenzaron a tratar a la mujer y pidieron un helicóptero médico. La mujer le dijo al agente Hiegel que perdió el control de su vehículo seis días antes y que permaneció dentro del mismo durante varias jornadas antes de salir", afirmaron las autoridades. 

Mientras era atendida, la mujer comentó a los agentes que esperaba llegar a algunas vías del tren cercanas, pero que no había sido capaz de lograrlo, porque se derrumbó donde los agentes la encontraron. Por suerte la historia ha tenido un final feliz.