LMDh 2022: así es el futuro conjunto del WEC y la IMSA

La IMSA es la máxima categoría de Resistencia en estados Unidos y el ACO –Automobile Club de l’Oues– son los organizadores de las 24 Horas de Le Mans. Estas dos instituciones, junto con la FIA que rige el WEC–, habían acordado a finales de enero una normativa común para que un mismo equipo o coche pueda participar en ambos certámenes a la vez, que entraría en vigor entre 2021 y 2022, dependiendo de la carrera.

Ahora, se ha confirmado el acuerdo de la normativa técnica y que por la covid-19, eventualmente los nuevos LMDh entrarán en vigor en enero de 2022 con las 24 Horas de Daytona, cita reina del calendario de la IMSA y primera de cada año.

En la rueda de prensa del circuito de La Sarthe donde se ha confirmado la noticia han estado John Doonan –presidente de la IMSA–, Pierre Fillon –presidente del ACO– y Richard Mille –presidente de la Comisión de Resistencia de la FIA–.

El WEC tiene el balón en su tejado ahora porque de cara a la temporada 2021 empezarán su normativa de hypercars, que sustituirá a los actuales LMP1 con las confirmadas presencias de marcas como Toyota, Aston Martin y Peugeot. Según el CEO del WEC, Gerard Nouveau, ambas categorías pueden coexistir y serán balanceadas con el Balance of Performance, habitual en carreras de Resistencia.

El precio de los LMDh, sin contar el motor, será de entre 1,1 y 1,2 millones de euros, según han confirmado los directores técnicos de la IMSA –Matt Kurdock– y ACO –Thierry Bouvet–. El peso mínimo será de 1.030 kilogramos y el coche tendrá 670 caballos de potencia, con una largada máxima de 5,10 metros y un ancho de dos metros. Cada constructor podrá moldear la sección aerodinámica exterior de su coche con sus propias señas de identidad. Las unidades de potencia tendrán la híbrida común y serán responsabilidad de Williams Advanced Engineering y Xtrac. Cada marca podrá construir su propia chasis o en la categoría de LMP2, comprar los comunes de firmas como Dallara, Ligier, Multimatic u ORECA.