Kia Stinger GT420: una divertida versión track-day

Pero Kia Gran Bretaña ha cambiado de opinión y ha explorado una nueva vía. Uno de los Kia Stinger GT usados a tal fin, que sufrió 16.000 kilómetros de duro y despiadado tramo, en lugar de ser reducido a chatarra fue transformado en un coche track-day, apto para disfrutar de él en un circuito con el apoyo del departamento técnico de Hyundai Motorsport en Rüsselsheim, Alemania.

El camino seguido es parecido al que están siguiendo algunos aficionados al automovilismo modestos, que a partir de coches de ocasión muy veteranos consiguen montarse un coche de carreras que les permite disfrutar de su deporte por un precio muy asequible. Incluso hay trofeos destinados a un modelo en concreto, con una preparación estándar mínima.

El Kia Stinger GT420 es un ejemplar único, pero que abre un nuevo camino. Su transformación ha sido total para hacer de él un vehículo de competición, con dos plazas.

El motor 3.3 V6 de serie gana más de 50 caballos para pasar a ofrecer 422, de ahí el nombre de GT420. Un aumento de potencia que se refleja asimismo en el aumento de par, desde los 510 Newton metro de serie a los 560 de esta versión. Ha sido obtenido mediante cambios en el encendido, la admisión y el escape –que pierde los catalizadores–, bujías y poco más. También se actuó sobre la transmisión DSG para que el cambio fuera más rápido y se mejoró la refrigeración del mismo.

Por supuesto, se han introducido refuerzos en el chasis, se han adecuado suspensiones con la adopción de amortiguadoras, muelles y barra estabilizadora Eibach Pro, y frenos mejorados por Brembo para su utilización en pista. Las llantas son OZ Racing Legera de 19 pulgadas con neumáticos Pirelli Trofeo R.

Se ha equipado con los elementos de seguridad necesarios, desde asientos delanteros baquet Sparco al arco de seguridad o el cinturón de seis puntos. Y si es coche de competición no podemos olvidar los detalles aerodinámicos, desde un splitter delantero, a un pequeño difusor posterior o un spoiler trasero, elementos ofrecidos por diversos especialistas para los amantes del tuning.

Y, sobre todo, una completa cuta de adelgazamiento: adiós al airbag, el equipo de música, a los sensores de aparcamiento, los amortiguadores de capó y maletero, tapicerías embellecedoras, espumas de insonorización, las tapas de plástico del motor… e incluso el techo practicable ha sido sustituido por una chapa o los elevalunas traseros. Así, pese a los elementos de seguridad y refuerzos, el coche pesa 150 kilos menos.

Un coche para disfrutar en los track-day, la única ocasión 'legal' para poder sentir la adrenalina de la velocidad. Con un coche como este Kia Stinger GT420, el disfrute es mucho mayor que con una versión normal de calle y, sobre todo, con mayor seguridad. Es cierto que las marcas de gran lujo y deportividad han encontrado un filón en este tipo de vehículos que sus propietarios sin competir o como máximo en carreras organizadas entre amigos o en reuniones de marca. Quizás Kia explora este segmento del mercado para ofrecer algo especial a ese especialísimo sector de clientes, poniendo al alcance de una base mucho más amplia.