Honda NSX: 30 años de una leyenda

El proyecto NSX, o New Sport eXperimental, tuvo su inicio en 1984, pero no fue hasta 1986 cuando tomó impulso de la mano del director ejecutivo Nobuhiki Kawamoto, pero sobre todo del ingeniero Shigeru Uehara. Se buscaba realizar un chasis muy ligero, y tras diversos estudios se optó por un bastidor monocasco. El diseñador Ken Okuyama hizo el resto con una carrocería inspirada, sobre todo en el habitáculo, en un caza de combate, con una línea deportiva atemporal. El prototipo definitivo presentado en 1989 era un poco más corto que el de producción, y el motivo estaba en el motor.

Y es que el NSX iba a contar inicialmente con un motor de cuatro cilindros, pero finalmente, para la producción se optó por un V6 DOHC VTEC de 2.9 litros y 270 caballos colocado en posición trasera transversalmente. A partir de ahí, y hasta la salida al mercado en 1990, se realizaron numerosas pruebas. En ellas, se contó con la aportación de Ayrton Senna, por entonces piloto del equipo McLaren propulsado por el motor Honda. El brasileño lo consideraba frágil, así que gracias a sus instrucciones se trabajó en mejorar la rigidez, algo que se consiguió aumentar un 50 por ciento.

Ahora se cumplen 30 años de aquél hito que aconteció también en febrero. Por eso Honda va a llevar el prototipo original del NSX a Chicago, como ocurrió hace tres décadas, y allí compartirá protagonismo con el modelo actual, una segunda generación de alto rendimiento pero que ya cuenta con hibridación. Es otra época y otro tiempo. Ahora cuenta con un mismo V6, pero biturbo de 3.5 litros y tres motores eléctricos que le otorgan 573 caballos en total, pero sigue siendo un coche excitante, como pudimos comprobar en nuestra experiencia con Fernando Alonso al volante del nuevo NSX en el circuito de Estoril.