El primer eléctrico de Bugatti se retrasa

Esto supone un cambio de tercio respecto a la estrategia original de la marca, que quería introducir un eléctrico en algún momento de esta misma década.

El director ejecutivo de Bugatti Rimac, Mate Rimac, dijo en noviembre de 2021 que "esta misma década habrá Bugattis completamente eléctricos", en convivencia con otros modelos de combustión.

Básicamente, lo que el fundador de Rimac Automobili vino a confirmar es que el futuro de Bugatti pasaba necesariamente por un superdeportivo híbrido y otro tipo BEV.

El objetivo de fondo no ha cambiado, pero sí los plazos.

Ahora Bugatti tiene puesta toda su atención en el sucesor del Chiron, que será un híbrido y que se presentará formalmente en 2027. Hasta entonces, ésa es su gran prioridad.

El director de Diseño de la firma, Achim Anscheidt, ha venido a decir que, para alcanzar la excelencia, no pueden dividir esfuerzos en dos proyectos simultáneos.

"Ahora mismo estamos pensando en dar el siguiente paso con el modelo híbrido. Todo lo demás queda demasiado lejos", ha dicho en declaraciones a la revista inglesa Autocar.

"Faltaríamos al respeto de nuestros clientes –si trabajasen en otro modelo antes de lanzar el híbrido–".

El director adjunto de Diseño, Frank Heyl, ha matizado que están trabajando "en esta década con el híbrido". Otra forma de decir que el primer eléctrico de Bugatti llegará después de 2030.

Se espera que el sucesor del Bugatti Chiron sea un híbrido enchufable que ronde los 50 kilómetros de autonomía. Será a buen seguro un superdeportivo de altos vuelos, porque la marca ha descartado por activa y por pasiva la posibilidad de crear un SUV.

La transición a la electrificación implicará la renuncia al monumental motor W16 que impulsó al añorado Veyron o al actual Chiron, porque el fabricante ya ha reconocido que es imposible electrificarlo. Resta por ver qué arquitectura adoptará este próximo Bugatti, que bien podría ser el último con motor de gasolina.