El Lotus Elise estuvo muy cerca de tener otro nombre

El Elise se dio a conocer el 12 de septiembre de 1995. El escenario escogido, el Salón de Frankfurt. Veía la luz después que la bici de alto rendimiento Lotus Type 110, de ahí que estuviera predestinado a ser el Type 111 según la nomenclatura tradicional que inició Colin Chapman.

Durante un tiempo, en Lotus todo el mundo trabajó con esa idea. Su responsable de comunicación del momento incluso insinuó a los medios ingleses que se llamaría 111. Pero entonces llegó el presidente Romano Artioli, que tenía otros planes en mente y propuso la solución que finalmente ha llegado hasta nuestros días.

"Yo incluso había comprado la matrícula 'M111 LCL' para ponerla en uno de los prototipos camuflados", explica ahora Patrick Peal, que tras ser director de comunicación de Lotus trabaja ahora como director ejecutivo de una empresa de aviones medicalizados.

"Visto en retrospectiva, Artioli acertó. Elise era el nombre perfecto para el coche. Lo compartía con una niña pequeña juguetona, su nieta Elisa, que ayudó a presentar el coche al mundo".

El plan original de la marca era presentar el Lotus Elise en la London Motorfair, en octubre. Pero Artioli también cambió de planes y eligió el Salón de Frankfurt. Sólo tuvieron cuatro semanas para preparar el gran día. Como parte de los preparativos, las sesiones de fotos se hicieron con nocturnidad en un estudio de Norwich, muy cerca de la Hethel.

"Decidimos presentar primero un chasis con la suspensión, los frenos y el subbastidor.  Yo me guardé un pedal del acelerador en el bolsillo para poder sacarlo en mis conversaciones y enseñar qué era el aluminio extruido. Pesaba menos que un reloj y sintetizaba a la perfección la innovación del vehículo".

"En la Fórmula 1 los equipos rivales no sabían nunca qué esperar de los coches de Colin Chapman, sólo sabían que sería pionero y que les sorprendería. En el Salón de Frankfurt ocurrió lo mismo, pero en vez de los equipos de Fórmula 1 los que estaban impresionados eran las otras marcas de coches. Sabíamos que el Lotus Elise revolucionaría la industria".