Los diseñadores de coches del futuro nacen en Valencia

La Universidad Politécnica de Valencia imparte un Máster de Diseño de Automóviles que ha sido protagonista durante casi dos meses en sus instalaciones. Allí se han expuesto desde el pasado 4 de noviembre los trabajos de final de curso de los alumnos de la 19ª promoción a la vez que se ha recibido a los de la vigésima, que es la que actualmente completa el aprendizaje.

Durante las semanas que ha durado la muestra se han dejado ver diferentes diseñadores que han salido de este máster y que a día de hoy trabajan en algunos fabricantes de renombre. Juan Carlos Huerta, por ejemplo, es el responsable de las formas del Audi e-tron Sportback, mientras que Jacobo Domínguez es el que trazó las líneas maestras del BMW Serie 8 Gran Coupé. También han salido de este curso diseñadores que han tenido que ver con los actuales Seat y Cupra León o con el Porsche 911, pero sus contratos de confidencialidad les impiden desvelar sus nombres.

Además de poder comprobar de primera mano cómo de efectivo es el Máster de Diseño de Automóviles de la Universidad Politécnica de Valencia de cara a encontrar trabajo en el sector, los alumnos también han podido ver cómo han pasado por las instalaciones representantes de empresas como Giugiaro Design, GTA Motor, EDAG y diferentes fabricantes de coches. Todos ellos escucharon los detalles de los casi 30 proyectos presentados este año, pertenecientes al ámbito del automóvil y también al de la movilidad. Los ha habido de motos, de yates de recreo e incluso de drones, entre otros.

La exposición final ha continuado en formato digital durante las últimas semanas con citas con diversos gabinetes de diseño y especialistas en todo el mundo que han querido conocer, de la mano de los alumnos, las motivaciones que hay detrás de cada diseño. Tras estas exposiciones varios alumnos ya están haciendo prácticas laborales.

En cuanto a la nueva promoción, se trata de 15 alumnos, el máximo permitido, que ya han comenzado con sus horas lectivas con la meta de convertirse en diseñadores en el horizonte. Las maquetas de antaño se han reemplazado por diseños en 3D que, con las gafas específicas, permiten ver un nivel de detalle no alcanzado antes. Además con esta tecnología se pueden hacer más diseños por curso, dar más relevancia a los elementos que ganan poco a poco protagonismo en la industria del automóvil y, en definitiva, prepararse mejor para el mundo laboral que espera tras dos años de formación.