Carlos Sainz ya ha personalizado su nuevo Ferrari
Carlos Sainz ha decidido que es momento de retirar su Volkswagen Golf y sustituirlo por un Ferrari 812, que ya ha reservado y customizado su gusto con detalles únicos. Para recibirlo tendrá que esperar como un cliente más, porque no se lo entregarán hasta de aquí un año.
El piloto de la Scuderia así lo ha anunciado en un vídeo en su canal de YouTube, donde ha compartido con sus aficionados la experiencia de personalizar un coche de calle de Ferrari en el Centro Stile de Maranello, concretamente en el departamento Tailor Made, que es el que se encarga de los proyectos más singulares.
Aunque Carlos no ha dicho qué coche se ha comprado, en el vídeo sí se ven imágenes de un interior que se corresponde con un Ferrari 812. Podría tratarse del 812 Superfast o del más exclusivo 812 Competizione. Y se aprecian dos toques personales: un volante que luce su autógrafo y su dorsal –prueba ambas opciones– y unas alfombrillas que incorporan su número 55.
El 812 Superfast equipa un V12 atmosférico de 6.5 litros que entrega 800 caballos de potencia, mientras que el 812 Competizione lo eleva hasta los 830 caballos. En su momento ambos fueron los motores más potentes creados jamás por Ferrari, aunque han sido superados recientemente por el exclusivo Ferrari Daytona SP3.
El 812 Superfast cuesta unos 339.000 euros, mientras que el 812 Competizione se va hasta los 556.000 euros. Las personalizaciones posteriores elevan obviamente la factura final.
Hasta ahora, Carlos tenía en su garaje un Volkswagen Golf que sus padres le regalaron por su 18º cumpleaños. Sí es cierto que el Golf está en su residencia en España, por lo que en el extranjero a menudo ha tenido que conducir otros vehículos en su día a día como piloto de Fórmula 1.
Durante su estancia en el equipo McLaren, por ejemplo, la formación de Woking le cedió primero un McLaren 720S y después un McLaren 600LT, como no podría ser de otro modo teniendo el equipo británico su propia marca de coches de calle.
Y a principios de este año tuvo ocasión de ponerse detrás del volante del Ferrari SF90 Stradale, el hiperdeportivo híbrido enchufable de Maranello, que acredita 1.000 caballos de potencia. Pero, para su colección personal, se ha decantado por un 812 Competizione que reivindica el atractivo de un motor atmosférico.
