Acaba la fiesta nocturna en una fuente en Alicante
La Policía Local de Alicante ha sacado esta madrugada del interior de la fuente de una rotonda a un conductor que sufrió un accidente y que triplicaba la tasa de alcoholemia.
Dicen que uno de los remedios en caso de 'estar perjudicado por efluvios etílicos' es tomar una ducha. Quizás eso es lo que pensó el conductor de un veterano Toyota Land Cruiser esta madrugada en Alicante, que acabó su carrera en una de las fuentes de la ciudad.
El Toyota, conducido por un joven de 27 años, y por causas que aún se desconocen, no evitó una rotonda en la alicantina Avenida de Denia y fue a caer en la fuente sobre las 6:30 horas de hoy. Aunque él y su acompañante resultaron ilesos, les fue imposible sacar el coche de la fuente.
Dos patrullas de la Policía Local, el coche de atestados y una grúa se personaron de inmediato en el lugar de los hechos, donde comprobaron que el conductor triplicaba la tasa de alcoholemia permitida.
Precisamente la Policía Local ha desplegado este fin de semana un operativo veraniego de controles de alcoholemia y otras sustancias estupefacientes tanto en las entradas y salidas de la ciudad, como también en las zonas de ocio.
Tras una hora de vanos esfuerzos para sacar el vehículo de la fuente, recurrieron a a la ayuda de los Bomberos, que con unas rampas y la ayuda de la grúa, consiguieron el objetivo. El problema era que el murete de la fuente era excesivamente profundo para que el coche saliera por sus propios medios.
El conductor fue puesto a disposición de la autoridad judicial, acusado de un delito contra la seguridad del tráfico, aparte de la correspondiente multa y la pérdida de puntos consiguiente.
Hace unos días una conductora confundió en Barcelona la escaleras de acceso al metro con la rampa de entrada a un parking. Pese a lo absurdo que pueda parecer, no es la vez primera que sucede, ni en una ciudad como Barcelona, aunque en ese caso no media de por medio el alcohol.
Lamentablemente el alcohol y otras sustancias que disminuyen la capacidad de conducir está presente en buena parte de los accidentes de tráfico, más del 50%, pese a que las multas son cuantiosas y, en algunos casos, van aparejadas con pena de cárcel.
