Alpine, ante la tercera refundación: No basta con cambiar la cúpula, hay que cambiar el método
Hubo un tiempo en el que los aficionados franceses zanjaban cualquier discusión con una frase que no admitía réplica: “Moi, ¡moi j’ai un Alpine!”. Eran los tiempos en los que Alpine dominaba el mundo de los rallies, peleando con Lancia.