Fórmula 1 fuera de contexto
Es como si la F1 realizase un 'bolo' o un 'cameo', tuviera su momento de gloria... reservado a un solo equipo o un solo piloto.
En los años de gloria y millones, cuando los F1 se presentaban de forma ostentosa y en gran estilo, en alguna ocasión se rodó a modo de exhibición. Todos recuerdan como referencia la fastuosa presentación que McLaren hizo en Valencia en 2007, el primer acto público de Fernando Alonso con el equipo. También Renault realizó en Italia una vistosa presentación de su equipo.
Pero hoy las presentaciones no están de moda, aunque priman los road shows. Estos se realizan por otros motivos, desde publicitar un Gran Premio, como hizo Renault antes del GP de Francia de este este año a un evento promocional de un patrocinador, pasando por acercar la F1 a lugares remotos, dispuestos a financiar buena parte de la exhibición o bien, aprovechar el tirón mediático de un piloto en un país privado de la F1. Por no hablar del espectáculo que acostumbran a montar en Rotterdam.
Red Bull ha ido más lejos en este campo. La marca austríaca, en lugar de publicidad convencional, sabe jugar con las redes sociales y los medios de comunicación creando eventos distintos. Y así hemos visto a los Red Bull bajar una pista de esquí –cosa que BMW ha hecho algunas veces– en Kitzbühel, surcar una playa caribeña –con Jaime Alguersuari al volante–, subir por la carretera más alta del mundo que salva el Himalaya o rodar en Austin cuando simplemente era una idea y la pista no estaba construida.
Ferrari también ha hecho sus pinitos sobre la nieve cuando Marlboro organizaba una semana de pretemporada para la prensa en Madonna di Campiglio.
Pero todas estas demostraciones no tenían el cronometro –algo innato e ineludible cuando se trata de un F1– como testigo. Sólo en algunos desafíos contra un caza o una moto de MotoGP, para descubrir al que acelera más rápido, se hacía un evento festivo.
En cualquier caso, el exotismo de estos eventos les aseguraba muchas páginas, en las revistas deportivas y en muchas otras que normalmente no hablan de deporte. Y esto les hace muy rentables… en parte porque, además, el material usado está por completo amortizado.
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