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Williams llega a Melbourne como primero del resto de mortales después de lo visto en los test de pretemporada. El día ha repartido suerte dispar para sus pilotos y, mientras que Bottas finalizaba en tercera posición el FP1, Massa se veía obligado a ver la segunda sesión desde el garaje por una fuga de agua. Los de Grove aún no han enseñado sus cartas y podremos ver su ritmo de clasificación mañana en la tercera sesión de libres.

Se acaban los adjetivos para describir la situación que Sauber está viviendo en Australia con el caso Van der Garde. Los suizos no han salido a pista en el FP1 y en la segunda tanda de libres, han decidido rodar siendo conscientes de las consecuencias que eso puede tener. Incluso desde Melbourne se ha comentado la posibilidad de que la policía del Estado de Victoria precintara el box de Sauber y se llevara a Monisha Kaltenborn a declarar.

Después de dos más de dos meses sin competición, por fin vuelve la Fórmula 1 y hoy jueves hemos tenido el primer aperitivo antes de que los coches salgan en los entrenamiento libres con la rueda de prensa oficial de la FIA en la que se han sentado Max Verstappen, Kevin Magnussen, Valtteri Bottas, Sebastian Vettel, Lewis Hamilton y Daniel Ricciardo. Aquí, un top ten con las mejores frases que nos ha dejado la rueda de prensa:

Dentro de unas horas veremos por fin a los coches rodar sobre el asfalto de Melbourne en lo que será una primera prueba real para evaluar el rendimiento de cada equipo después de los test invernales. Test en los que Ferrari ha sido una de las grandes sensaciones. Los de Maranello han mostrado una mejor cara que la del 2014 y, aunque hay ciertas reticencias a aceptar que pueden ser competitivos, desde el seno del equipo las declaraciones son alentadoras.

La figura de los rumores acerca de Audi y la Fórmula 1 se asemeja a la del Guadiana atravesando Extremadura. A veces aparece, y a veces se esconde, pero el río nunca deja de sonar.

Las parrillas de las categorías inferiores empiezan a poblarse cada vez más de apellidos conocidos en el mundo de la Fórmula 1, entre los que se encuentran dos de los más influyentes de la historia de este deporte: Newey y Schumacher.

El poco rodaje que acumularon en Jerez y Barcelona hace que McLaren llegue como el equipo sobre el que más duda la parrilla. No sabemo cuál es su rendimiento ni cómo se comportará el coche, pero apuntan a que la base es lo suficientemente buena como para mejorar y demostrar su potencial durante la temporada.

Ríos de tinta han corrido desde el día 22 de febrero cuando Fernando Alonso sufrió el extraño accidente que le ha obligado a perderse la primera cita del calendario, un accidente cuya explicación aún no está clara debido a las extrañas circunstancias que lo rodean.

Mercedes llega a Melbourne con la etiqueta de favoritos, posición que casi con total seguridad mantendrán a lo largo de la temporada. Los test de invierno han confirmado la mejoría de un monoplaza que ya era casi perfecto,y el resto de escuderías tendrán que luchar muy duro para alcanzar a las flechas de plata.

Por fin en semana de Gran Premio, todos los ojos están mirando hacia Melbourne, aunque en lo referido al resultado final, no hay muchas dudas sobre quiénes ocuparán las dos primeras posiciones.

Llegar a un acuerdo en la Fórmula 1 es algo, cuanto menos, imposible. Sin embargo, parece que tras los test de pretemporada todos los que componen el Gran Circo no puede más que asentir con la cabeza ante la afirmación de que Mercedes volverá a dominar en 2015.

Día a día llegan teorías y nuevas informaciones acerca de un accidente sobre el que el propio Fernando Alonso ha ironizado través de las redes sociales con la etiqueta #DondeTeHasDespertadoHoy.

Las consecuencias del accidente que Fernando Alonso sufrió en Montmeló no sólo han afectado al piloto asturiano, sino también a aficionados, periodistas e incluso otros pilotos.

El futuro del Gran Premio de Alemania sigue aún en el aire. Nurburgring y Hockenheim arrastran sendos problemas financieros y, mientras se pasan la patata caliente el uno al otro para organizar un Gran Premio que por contrato le tocaría al “infierno verde”, la F1 ve cómo una de sus citas más célebres podría caerse del calendario.