Warwick: "El GP de Gran Bretaña no existirá para siempre"
Derek Warwick, expiloto de F1 británico, ha sido durante seis años y medio presidente del BRDC, asociación encargada de negociar con la F1 la continuidad del GP de Gran Bretaña en Silverstone. Warwick apunta que quiere seguir con la F1 en Silverstone más allá de 2019, pero que para renovar el acuerdo, deberán cambiar los términos.
"El Gran Premio es demasiado caro, estamos perdiendo dinero y es por ello que accionamos la cláusula de ruptura de contrato", ha asegurado Warwick en declaraciones al rotativo The Jersey Evening Post.
En julio, el British Racing Drivers Club anunció que activará esa cláusula y que por contrato, el último GP de Gran Bretaña de F1 que organizarán en Silverstone –circuito del que son propietarios– será el de 2019.
"Gran Bretaña es la casa del automovilismo. ¿Significa eso que siempre existirá el GP de Gran Bretaña de Fórmula 1? Absolutamente no. Claro que queremos que se quede en Silverstone, pero queremos que sea permisible –económicamente– para que generemos suficiente dinero como para re-invertir en el circuito. Y eso no se podía hacer con el acuerdo actual", ha añadido Warwick.
El británico dejó su puesto en el BRDC cuando tuvo que someterse a quimioterapia por un cáncer de intestino en 2015 y que finalmente pudo vencer. Sin embargo, nunca ha dejado de tener influencia en el automovilismo británico.
Silverstone ha organizado 51 Grandes Premios de F1 incluyendo quizá el más importante de la historia, el primero de todos aquel 13 de mayo de 1950. Para salvar la situación, durante el verano de 2017 surgió el rumor de que Liberty Media podía incluso comprar el circuito de Silverstone para mantenerlo a flote en el calendario.
"Ahora mismo debemos intentar ver de qué modo podemos hacer que Silverstone siga en el calendario más tiempo. Tenemos un contrato firmado con ellos para los próximos tres años, así que tenemos mucho tiempo y simplemente debemos acordar de qué forma encaramos el asunto", reconocía el CEO de la F1, Chase Carey, en una entrevista con SoyMotor.com.
© Sutton – Derek Warwick (izq.) y Ayrton Senna (der.) comparten podio en la victoria de Niki Lauda (centro) en el GP de Inglaterra de 1984.
RIVALIDAD DEPORTIVA CON SENNA... Y NO TAN DEPORTIVA
Warwick, además de hablar sobre la situación del GP de Gran Bretaña, ha explicado por qué Ayrton Senna le 'arruinó' su trayectoria deportiva. El británico compitió en 162 carreras de F1 entre sus carreras con Arrows, Renault, Toleman, Lotus, Footwork y Brabham.
Su mejor año en F1 fue 1984, cuando acabó séptimo el Mundial con grandes acutaciones como el segundo puesto en Brands Hatch, donde precisamente pudo mantener detrás suyo al Toleman de Senna.
El astro brasileño se fue rumbo a Lotus en 1985, donde consiguió dos victorias y un total de seis trofeos para llevarse a casa –cinco de ellos consecutivos– en un año donde compartió box con Johnny Cecotto y Stefan Johansson.
Al quedarse un hueco libre al lado de Senna en Lotus para 1986, la escudería británica pensó en Derek Warwick, y de hecho llegaron a firmar un contrato: "El contrato decía que los dos pilotos serían iguales para el equipo y tendrían uso alterno del coche extra", afirma Warwick.
Sin embargo, eso estuvo lejos de ser realidad, dado que Senna quería tener un estatus de piloto número uno destacado en el equipo y al lado suyo, un compañero que lo aceptase. Al tener el talento y los patrocinadores –la influencia–, Lotus le hizo caso y descartó a Warwick para fichar a Elio de Angelis finalmente.
"Senna tenía mucha fortaleza con los patrocinadores que tenía él y que le decían a Lotus que rompiesen mi contrato", ha asegurado un Warwick que cree que la razón para forzar así la situación es que Senna estaba intimidad por su talento.
"Al 100% lo creo. No quería estar amenazado por un piloto británico en un equipo británico, porque sabía que el equipo no podría tener a dos pilotos 'número uno' y el quería el coche extra para él sólo", agrega el británico.
Así que después de ese fiasco, Warwick sólo encontró posibilidades en equipos menores que nunca le permitieron luchar por victorias o títulos del mundo. Todo ello que él afirma que podía conseguir, fue culpa de Senna.
"Senna arruinó mi trayectoria. Regresé luego a la F1 pero con equipos menores mientras yo creía que podría haber ganado carreras y haber sido campeón del mundo", concluye.
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