Sainz, dispuesto a usar más de tres motores si así Renault progresa

Los propulsores tienen que durar un promedio de siete carreras para no incurrir en penalización, lo que condiciona el calendario de los motoristas y les fuerza a hacer coincidir sus innovaciones con la vida útil de cada unidad.

Pero Sainz sabe que el equipo oficial de Renault no peleará por el título mundial, por lo que cree que no tendrán inconveniente en gastar más motores de lo previsto si eso les permite ganar competitividad en la pista.

"No creo que luchemos por el Mundial. Somos un equipo que quiere crecer durante el año y eso significa que quizá haya que poner actualizaciones para la unidad de potencia, así que habría que poner más motores y no los tres que hay previstos", dijo ayer martes, día en el que perdió dos horas en boxes por una serie de comprobaciones mecánicas en su unidad de potencia.

El madrileño explica que el equipo todavía no ha tocado techo y que aún está en proceso de construcción. Terminaron la temporada 2017 en la sexta posición del Mundial de Constructores, pero en ésta pueden convertirse en el mejor equipo de la media parrilla, como mínimo.

"Es otro año para que Renault dé pasos adelante. Si esta estrategia es la adecuada para que los demos, lo haremos. Si hay un motor que pueda dar más potencia, lo tomaremos. Espero que sea el caso y mantengamos el progreso".

Carlos Sainz está en Montmeló para participar en los entrenamientos de pretemporada, aunque todavía no ha podido extraer conclusiones válidas sobre la competitividad de su nuevo RS18. 

El frío que azota el Circuit ha propiciado temperaturas absolutamente irrelevantes para la práctica invernal.

"El lunes empezó a llover, el martes la temperatura era de cinco grados… Todavía no he podido notar realmente el coche de 2018. No estoy preocupado, porque sé que la semana que viene hará 15 grados y la pista estará a 20 o 25. Lo notaré y lo pondré a punto".