Análisis numérico

El demoledor ritmo de Alonso: así se fraguó su remontada

02/05/2021 20:29

Fernando Alonso fue ampliamente superado por Esteban Ocon en la clasificación de ayer. Hoy, el asturiano tuvo una mala salida que le dejó ocho posiciones detrás de su compañero de equipo. Sin embargo, casi le bate al final de carrera. ¿Cómo es posible que el español haya tenido un ritmo tan incontestable.

 

Al principio de la temporada Fernando Alonso no tardó en regalar a la Fórmula 1 un poco de su magia. A pesar de ello, el fin de semana de Imola fue para olvidar para el 14, que ayer cayó eliminado en Q2 cuando tenía coche para Q3. La diferencia con Ocon fue de 0,870 segundos. Una distancia irremontable de un día para el otro.

Bueno, no para Fernando Alonso.

 

LA ESTRATEGIA, EXPLICADA

Alonso partió 13º el GP de Portugal y pasó por meta 15º al término del primer giro, mientras Esteban Ocon era séptimo. Ocho posiciones de diferencia cuando el francés rodaba con blandos usados y el asturiano con medios nuevos.

Como podemos ver en el gráfico inferior, así se dibujaron las carreras de los dos pilotos de Alpine, que acabaron a un segundo de diferencia entre ambos y con meritorias séptimas y octavas plazas.

Pero para entender mejor los números, vamos por fases. Centrémonos primero en la tanda inicial –dado que ambos pilotos hicieron un sólo paso por boxes–. Ocon, con aire limpio y en séptima plaza, rueda en 1'23" medios –nótese el eje vertical con las referencias de tiempos–. Con todo el tráfico que tenía encima, Alonso apenas podía llegar a los 1'24" desde la resalida del coche de seguridad –vuelta 7 de 66– hasta pasada la vuelta 16.

Sin embargo, y como hemos visto en el gráfico anterior, desde la vuelta 17 los blandos de Ocon dicen 'basta' y los medios de Alonso empiezan a tener temperatura suficiente como para estar en 1'23· bajos o incluso 1'22" medio-altos. Esto nos lo muestra el gráfico inferior con toda la tanda de medios de Alonso al completo.


PARA MERENDAR, CRONOS

El hambre de Fernando Alonso a sus casi 40 años es irrefrenable, y la carrera de Portimao así lo demuestra. Pasado el ecuador de la carrera, a eso de las cinco y poco de la tarde españolas, Alonso puso neumáticos duros para merendarse al resto de su competencia.

Antes de que corran a la zona de comentarios a tildar esta pieza de fanatismo, les voy a pedir un minuto de su tiempo para revisar lo que dicen los datos.

Alonso pone los duros cuando Ocon ya estaba con la goma dura de Pirelli. Y desde el inicio del 'stint', no hubo color. Alonso empieza en 1'22" bajos y acaba en 1'20" altos, mientras que Ocon nunca llega a los 1'21". 

Alonso empezó a remontar y adelantó a Giovinazzi, Gasly, Ricciardo y Sainz en pista. Tras hacerlo, en la vuelta 55, el piloto español por primera vez en la carrera tiene aire limpio, igual que su compañero de equipo.

En ese momento, Alonso decide romper todas las referencias y empieza a rodar cómodamente en 1'21" y tiene varias vueltas coqueteando con los 1'20" altos, que no estuvieron al alcance de McLaren, Ferrari o Alpine en toda la carrera.

Alonso recorta 7,5 segundos a Ocon en las últimas 13 vueltas. Así es cómo llegaron a acabar la carrera apenas un segundo de diferencia, siendo la última vuelta de Alonso 1,254 segundos más rápida que la de Ocon. Recordemos, después de estar nueve décimas por detrás en clasificación.

La última vuelta de carrera de Alonso es un 1'21"032. La última de Lewis Hamilton –con duros– es un 1'22"011. Sí, un segundo de diferencia. La última vuelta de Valtteri Bottas con neumáticos blandos de dos vueltas de desgaste es de 1'20"826. Mientras el 77 buscaba la vuelta rápida de carrera con blandos nuevos, Alonso se queda a dos décimas con duros.

Podemos poner más ejemplos como el 1'23"729 de Charles Leclerc, el 1'21"766 de Sergio Pérez o el 1'22"303 de Lando Norris, pero no encontrarán otra tanda final como la de Fernando Alonso, que hoy ha demostrado con números –y no sólo palabras– que su hambre sigue intacta.