Un híbrido bestial: un Mercedes C63 AMG con cuerpo de 190E Evo

A lo largo de cinco años, Piper Motorsport se dedicó a combinar la carrocería del 190E con un kit que imita el aspecto del EVO II 2.5 16v de la década de 1990 y los elementos mecánicos de un motor W204 C63 AMG fabricado entre 2008-2014, que incluye transmisión, suspensión, frenos, electrónica y varios elementos más.

Es decir, esto no es solo un cambio de motor, sino una transformación completa. Para que todo encajara, era necesaria una gran cantidad de trabajo. Por ejemplo, la distancia entre ejes se acortó, se agregaron refuerzos y se reconstruyó por completo el compartimiento del motor para que se ajustara a todos los componentes nuevos debajo del capó del 190E.

El V8 de 6.2 litros es más del doble del tamaño de los cuatro cilindros del 190E, que en su evolución EVO II producía 235 caballos. Por el contrario, el C63 AMG original tiene casi el doble, con 457 caballos a su disposición. Pero es que además, este coche también cuenta con un turbo con un enfriador montado en el maletero. Por supuesto, este 190E no comenzó como un modelo de evolución, pero el cliente solicitó que el producto final fuera similar a un EVO II, al menos en el exterior. Por dentro, es una historia completamente diferente.

Porque el interior conserva el diseño del cuadro de mandos e interior del Clase C W204, aunque se hizo necesario instalar una consola central adaptada para incorporar una palanca de cambios automática de 7 velocidades, y los interruptores de las ventanillas eléctricas. No hay más datos en cuanto a este híbrido, puesto que el propietario pretende ofrecerlo a un punto de venta aún desconocido. Quizás entonces sepamos más de este matrimonio que se nos antoja perfecto entre un clásico atemporal y una base de alto rendimiento. Un Mercedes-Benz épico.