Edoardo Mortara consigue su sexta victoria en Macao

El italiano ha salido desde la Pole Position y ha hecho lo que sabe hacer: administrar una carrera que de por sí se ha planteado complicada. La lluvia matinal ha limpiado toda la goma de la pista, y en el momento del banderazo verde para la carrera de GT aún se han apreciado algunos parches de humedad en el circuito.

Mortara se ha distanciado del grupo en los primeros metros pese a rozar el muro en la salida. Por detrás, Augusto Farfus y Raffaele Marciello se han enzarzado en una pelea que ha terminado con Marciello fuera de carrera y Farfus muy retrasado en el grupo. En la vuelta seis, después de que Mortara abriese un margen de más de seis segundos, se ha accidentado Lucas di Grassi, y como resultado, el coche de seguridad ha entrado en pista.

En la resalida, Mortara se ha escapado mientras Robin Frijns y Maro Engel han peleado por posición. De nuevo ha abierto distancia, pero un nuevo incidente, en este caso de Darryl O'Young, ha vuelto a juntar al pelotón. Mortara ha vuelto a hacer de maestro de ceremonias en la resalida, y ha puesto pies en polvorosa tras el breve periodo de neutralización. Mientras, Farfus ha remontado hasta la cuarta posición, arrebatada a Chaz Mostert después de que el australiano rozase el muro en la parte alta del circuito.

Mortara ha cruzado la meta con Robin Frijns y Maro Engel muy enganchados. La presión del de Audi no ha podido con el italiano, y se lleva la Copa del Mundo de GT para Mercedes.

Dani Juncadella, por su parte, ha sido octavo final pese a ser partícipe en el incidente de Darryl O'Young, sin mayores consecuencias para el español. Terminar en Macao es un buen resultado vista la montonera de ayer, por lo que Juncadella puede darse por satisfecho tras la carrera de hoy.