Pirelli ya trabaja en una nueva versión de sus gomas de lluvia

Hoy no ha llovido en Barcelona, pero eso no ha sido impedimento para que Pirelli sufragara la aspersión de 500.000 litros de agua en el trazado de Montmeló para acondicionarlo para un test de sus P-Zero Cinturato. Ésta ha sido la primera vez que los coches de 2017 evolucionaban con estas gomas.

Paul Hembery ha constatado que su producto todavía no está acabado, y por ende ha explicado que ve posible introducir una nueva versión del mismo a fin de tener el mejor caucho posible.

"Tenemos que cambiar el rango de trabajo de los neumáticos. Lo íbamos a hacer con el primer juego de lluvia extrema, de todos modos. Es algo en lo que hemos trabajado, especialmente sabiendo que tenemos que hacer salidas en parado", explica en declaraciones reproducidas por el portal estadounidense Motorsport.com.

Hembery señala que los nuevos intermedios no rinden según lo previsto. "Decían que no queríamos que lo cambiásemos, pero hemos visto que los intermedios también tienen problema. Es un efecto de la anchura del neumático. Ahora sabemos que quizá tendremos que alterarlo para igualarlo".

Romain Grosjean opina en la misma línea. "El intermedio es muy bueno para una vuelta, pero entonces se destruye muy rápido. Han de hacer algo más de trabajo, pero generalmente es un buen paso. El de lluvia extrema es bastante interesante; se han hecho grandes progresos respecto a la temporada pasada", decía en su rueda de prensa.

Paul Hembery ha dejado entrever que estas modificaciones irán más allá. "Es probable que haya una situación en la que quieras dos neumáticos de agua, uno para condiciones de más calor y otro para Silverstone o Spa, donde hace más frío. Creo que para China tendremos algo listo, en términos del primer cambio de compuestos".