El coche autónomo empieza a 'entrar por los ojos'

Según los datos recogidos por esta web, el 38,4% de los conductores españoles estarían dispuesto a comprar un coche autónomo. Una cifra nada despreciable que certifica que casi 4 de cada 10 conductores estarían dispuestos a tener un coche autónomo. Entre los principales motivos esgrimidos para afrontar la compra de un coche autónomo aparece evitar el estrés (38,6%), aprovechar el tiempo para hacer otras actividades (37,8%), una mayor sensación de seguridad (18,7%) y no tener que conducir (4,9%).

Unos datos esperanzadores para una tecnología que tiene un largo camino por recorrer hasta asentarse en el mercado como una realidad. De hecho, todavía un 61,6% de los encuestados no se fían de la tecnología autónoma, ya sea porque les gusta conducir (55,8%), porque tienen un sentimiento de desprotección (25,3%), por culpa de los eventuales fallos mecánicos (14,3%) o por el precio que tendrán estos vehículos (4,5%), ya que entiende que serán muy caros.

Al margen de la tecnología autónoma, el conductor español tiene muy buenas referencias hacia los sistemas de ayuda a la conducción derivados los coches autónomos. El sistema de frenada de emergencia es el complemento de seguridad preferido de los españoles, seguido muy de cerca por el detector de ángulo muerto. Dos de cada tres españoles quieren estas tecnologías en sus coches, mientras que la iluminación nocturna inteligente también es un complemento muy valorado por los usuarios.