Mercedes-Benz Clase A 2015: más joven y exitoso

No se puede hablar de cuarta generación, pero la evolución del Clase A ha sido muy destacada. A nivel exterior presenta algunos cambios de diseño, pero también su interior se ha modificado y mejorado algunos aspectos. Por si no fuera suficiente también se ha realizado una mejora en el equipamiento y se han apostado por nuevas mecánicas, lo que a la postre le ha servido al Clase A para ser el nuevo rey entre los compactos del segmento en términos de potencia. El Mercedes-AMG A 45 llega hasta los 381 CV, aunque ya hablaremos de él detenidamente.

A nivel exterior, las líneas maestras de su diseño no cambian. Gran voladizo delantero con un capó largo y una trasera realmente corta. En cualquier caso, este restyling presenta una nueva parrilla delantera de estilo diamante acompañada por un paragolpes de nuevo diseño. Las entradas de aire son de mayores dimensiones. La calandra también ha sido retocada y las ópticas ahora pueden equipar tecnología LED para las luces de cruce y largas.

Las llantas de nuevo diseño son el principal cambio en el lateral del Clase A, mientras que en su zaga también se ha trabajado sobre las ópticas. Al igual que en el frontal se ha diseñado un nuevo paragolpes integrado en el trabajado difusor, que además incorpora las salidas de escape, marca de la casa y solución que ya se ha podido ver en otros modelos de Mercedes, sin ir más lejos el Clase C.

La oferta de propulsores y modelos ha sido completamente revisada hasta dibujar cinco opciones diésel y ocho de gasolina dentro de la gama. Todos los propulsores cumplen la normativa Euro 6. El motor de acceso de gasolina es el 1.6 turbo de 102 caballos y 160 Newton por Metro (Nm) de par. Este bloque motor acredita un consumo de 5,1 litro a los 100 kilómetros. Por su parte, el motor más económico entre la oferta de propulsores diésel es el A 160 d, un motor de 1.5 litros y 90 caballos de potencia.

El modelo más eficiente pasa a ser el A 180 d Blue Efficiency gracias a un propulsor de 4 cilindros, 1.5 litros y 109 caballos de potencia, que asociado a un cambio manual de seis velocidades consigue registrar un consumo de 3,5 litros a los 100 kilómetros. Ya en la gama diésel, cabe destacar el aumento de potencia sufrido por los propulsores que montan el A 250 Sport y A 250 Sport 4Matic que entregan 218 caballos, siete más que la anterior generación de motores. Como rey queda el motor 2.0 de 381 caballos que monta el A 45 Matic.

Si nos introducimos en su habitáculo, si que encontramos más cambios, quizá para conseguir reforzar la imagen deportiva del Clase A. Nueva instrumentación que puede ir unida a una pantalla de 8 pulgadas que gestiona el sistema de infoentretenimiento. Nuevas tapicerías, asientos y un paquete de iluminación interior son quizá los cambios más destacados de un interior que no renuncia al confort a pesar de tener una imagen más radical que en los inicios de la tercera generación.

Al margen del A 45 4Matic (al que le dedicaremos un artículo al margen), quizá las opciones más atractivas de este nuevo Clase A pasan por las dos variantes más deportivas, el A 250 y A250 Sport, con cambio manual o automático. Sin embargo, la versión Clase A Motorsport Edition abre una nueva dimensión ya que a partir del modelo A 200 en adelante se puede optar por una decoración que comparte los colores grises y verdes del monoplaza de Mercedes en F1. Su imagen es muy similar al A 45 AMG con detalles propios de esta versión, comenzando con unas llantas de mayor tamaño.