La F1 no descansa: tres semanas sin carreras implican un ritmo frenético en la fábrica

En el momento en que los coches vuelen hacia Austin, los desarrollos de 2024 habrán finalizado. Todo se concentrará cara a 2025 con el objetivo de tener el coche listo lo antes posible y despejar el túnel de viento las simulaciones por ordenador para el coche de 2026, el de las nuevas reglas, que acabarán absorbiendo todos los recursos posibles. Quien llegue con retraso al primer GP de 2026 puede despedirse de estar en plazas delanteras por dos o tres temporadas. Quién llegue con algún truco inesperado bajo el brazo, puede sentar las bases de un dominio por dos o tres años.

Red Bull es el equipo que está bajo más presión. El título de constructores parece que volará de Milton Keynes a Woking… pero debe hacer lo imposible para que Max Verstappen logre el de constructores.

Lando Norris es una amenaza real para Max, aunque necesitará mucho ayuda de Oscar Piastri y de Ferrari o Mercedes para decantar la batalla a su favor. Está claro que en estos momentos el Red Bull no es el mejor coche. Los rivales han conseguido neutralizar la ventaja que los ‘energéticos’ tenían. Pero no todo el mérito es de los perseguidores. Da la impresión de que Red Bull ha dado un paso atrás este año, ha cometido errores importantes en el RB20 que, recordémoslo, no ha seguido las pautas que Adrian Newey habría deseado.

McLaren ha hecho un gran desarrollo desde el pasado año, incluso éste. Lo mejor de los ‘papaya’ es que cosa que han traído, cosa que ha funcionado. Pero ahora se enfrentan a un dilema ante un fina de temporada de lo más apretado. Red Bull, por el contrario, introdujo muchos cambios en el RB19. Diríase que consideraron que la vía de estos últimos años por considerar que había llegado a tope.

Aunque en el equipo señalan que el RB20 es una evolución del coche de 2023… está claro que los cambios fueron muchos y visibles y a principios de temporada en los mentideros del paddock se hablaba de coche absolutamente nuevo.

Pierre Waché admite que aunque “el coche ha mejorado con respecto al año pasado no hemos conseguido mejoras suficientes en algunos aspectos, como las curvas de alta velocidad”, antes de señalar que esperaban “algo más de nuestras herramientas”. 

Comenzaron algo por delante de sus rivales, pero cuando estos comenzaron a mejorar… no han podido seguir el ritmo. Parece que el Red Bull es eficaz, muy eficaz, cuando el circuito tiene un asfalto liso, perfecto… pero cuando hay ondulaciones, baches, etc. tiene dificultades para adaptarse. Necesita suspensiones muy duras para que su eficiencia aerodinámica funcione. McLaren es más moldeable y Mercedes ha avanzando mucho en lo que a suspensiones se refiere para aceptar mejor los caprichos del asfalto.

Pero sobre todo, Mercedes y McLaren, también Ferrari, han comprendido más rápido que en la actualidad la ganancia pasa más por el ala delantera que por el fondo.

Pero hay otros detalles clave. Por ejemplo, Red Bull puede estar sufriendo por tener menos horas de túnel de viento. McLaren, beneficiándose por partida doble: por las horas y por tener ya en funcionamiento su nuevo túnel.

Quizás si McLaren no hubiera tenido que esperar a Miami para poder estrenar todas las mejoras previstas, ahora tendríamos a Norris y Piastri en las dos primeras posiciones del campeonato.

Mercedes ha abandonado sus conceptos radicales -primero los pontones, después las alas delanteras- por desarrollos más convencionales. Todavía tienen altibajos, pero están en condiciones de jugar sus bazas.

En Ferrari, el problema de pasadas temporadas en las curvas de baja velocidad fue solucionado con brillantez… lo que no se vio en Singapur porque fallaron en la Clasificación. Buscando recuperar la eficacia sacrificada en las curvas rápidas cayeron en las garras del ‘fenómeno rebote’ y les costo solucionarlo. Lo han conseguido, pero quizás no lo suficiente. 

Son seis carreras. Dos fases de tres carreras triples y con tres de ellas con ‘carrera sprint’, donde las probaturas son altamente desaconsejadas.

Pero está claro que pueden haber sorpresas. Los coches de 2025 serán un desarrollo de los de este año, por lo que quizás alguna cosa pueda ser introducida en los tres últimos grandes premios. Pero se sospecha que tal como acaben esta temporada se continuará en la próxima. Así que esta última vuelta de tuerca es mucho más importante de lo que se cree… para todos.