El 'lío familiar' de los Herta en Indianápolis

Los coches de Andretti no han ido muy bien en clasificación. Ninguno entró en los ‘Top 12’ y el mejor fue Kyle Kirkwood, decimoquinto, mientras que Colton sale 21º.

El caso de Colton, o el ‘lío de la familia Herta’ es curioso. Su padre, Bryan Herta, uno de los pilotos clásicos de IndyCar, será táctico de Kirkwood. Bryan nunca ganó Indy, pero lo hizo como propietario de equipo y por dos veces: lo hizo con Dan Wheldon en 2011 y con Alexander Rossi en 2016.

Ahora, Bryan Herta está asociado con Andretti. Es algo típico americano. Una gran estructura que da servicio, casi fagocita, a la pequeña. Herta-Andretti w Marco & Curb Agajanian es el ‘entrant’, el propietario o concursante, del coche 98… pero Colton Herta no corre para este concursante, sino que lo hace Marco Andretti, el hijo de Michael Andretti y nieto de Mario Andretti.

Colton corre para Andretti Motorsport & Curb Agajanian. Pero Bryan Herta no está ni con Marco ni con Colton, sino que es el táctico de Kyle Kirkwood, inscrito por Andretti Motorsport.

Así que el lío familiar está servido. El equipo tiene un piloto de fuera, el piloto de casa está en otro equipo y el padre, uno de los grandes tácticos de Indy, va contra los dos. Pero todo ello de una forma natural.

Pero en Indy estas cosas se aceptan, son casi normales. Se ha visto padre correr contra hijo. Hermanos batallando. Y en teoría enemigos irreconciliables cooperando.

Takuma Sato ha ganado dos veces Indy, 2017 y 2020. Este año, sin embargo, sólo tiene un programa parcial, corre en ovales para Chip Ganassi… y quizás sea su último Indianápolis o quizás, como ilustres veteranos, vea como su temporada sólo se reduzca a las 500 Millas. Él cuenta mucho con esta carrera para ganar de nuevo plaza fija en temporada completa.

Sato pudo haber ganado también en 2012. Salía 19º, pero al llegar al final de la prueba era segundo tras Dario Franchitti, que había salido 16º. Intentó superarlo en la curva 1 al iniciarse la última vuelta, pero el escocés le cerró y fue al muro mientras Dario se iba a por la bandera de cuadros, la victoria y la botella de leche.

Hoy, Dario es ‘coach’ de Sato en el equipo de Chip Ganassi.

Una carrera curiosa: Franchitti, Dixon, Kanaan y Servià fueron los cuatro primeros. Salían 16º, 15º, 8º y 27º. Ni la pole ni la primera fila son determinantes: se han disputado 106 ediciones de las 500 Millas; en sólo 27 ha ganado el poleman.