Análisis GP Australia F1 2023: la doble cara de Verstappen

Verstappen no tuvo para nada un inicio de carrera cómodo, ya que fue superado por los dos Mercedes y no pudo recuperar la segunda posición hasta la segunda salida, ya después de la bandera roja, cuando superó a Lewis Hamilton. El piloto británico fue su principal rival durante toda la carrera, con un gap que se fue gestionando de diferente manera, en función de la necesidad que pudiera tener el equipo austríaco. En la siguiente imagen se puede ver la comparativa de la distancia entre ambos

Se puede ver que la tendencia a la que se fue modulando la distancia no fue la misma en toda la carrera. Por una parte, Verstappen fue capaz de generar rápido unos 4seg, de los cuales 2 se hicieron en apenas dos vueltas, con Hamilton en las vueltas antes del VSC creado por el abandono de Russell, y esta misma tendencia se siguió manteniendo hasta la vuelta 32. Desde ahí ya la generación del gap ya fue mucho más estable, controlada, hasta que incluso en la parte final de la carrera llegó a estar en valores neutros, especialmente tras la salida de pista que tuvo en la curva 13 y que le costó más de tres segundos. 

Estas fue la comparativa de vueltas entre ambos

Lo primero que se pudo ver es la gran generación de tiempo que tuvo el holandés, especialmente en la vuelta 12, con un 1:21.9, que fue más de 2.7seg mejor que Hamilton, debido especialmente al adelantamiento que efectuó en la llegada a T9 y el gran paso que hizo por esta zona de la vuelta, en el que estuvieron esos dos segundos. Desde ahí rodaron a unos tiempos mejores para el Red Bull, que se pueden resumir en esta imagen

En las vueltas previas al VSC Verstappen tuvo 0.5seg sobre Hamilton, de los cuales tres décimas estuvieron en la zona final de la vuelta, gracias a la mayor velocidad en recta que tenía el Red Bull y a su manera de superar la chicane T9-T10. De hecho, ya a una vuelta casi todo el tiempo lo tuvo en esta zona, desde la salida de la curva 6 a la llegada de la curva 11. En las siguientes vueltas en que el holandés siguió empujando volvió a sacar otras cuatro décimas, con una estructura similar, de una décima en S1, nada en la zona central y tres al final de la vuelta. Y ya en la fase final de la carrera fueron capaces de cerrar y gestionar el gap, haciendo que sólo fueran centésimas en cada sector lo que hiciera que estuviera por delante, y sobre todo, tomando con mucho más control la chicane, ya sin necesidad de empujar tanto como lo estaba haciendo hasta el momento.

Todo ello nos indica dos cosas de una manera clara. Por un lado, el Red Bull no está a un segundo por vuelta de sus rivales, nunca lo ha estado. Su gap fluctúa entre tres décimas y las ocho décimas, en función del tipo de circuito. Y por otro, y en relación a esto, donde hace las diferencias Red Bull con sus rivales es en zonas de 240-320kmh. Por esto en Albert Park sólo tuvo un margen considerable, en todo el fin de semana, en la zona final, que tenía el final de recta y la rápida secuencia T9-T10. Y dio la sensación de que en Yeda estuviera tan lejos de todos, porque todo casi todo el circuito se hacía en esta zona de velocidad.

Red Bull es la referencia, pero no son imparables ni inaccesibles. Todo va a depender del tipo de circuito que se trate y las características que lo puedan formar. Y más en concreto, cuántas zonas en este rango de velocidad tenga el trazado. Yeda estuvo plagada, Sakhir tuvo varias zonas, como Albert Park, veremos cómo se maneja en siguientes escenarios.