Vettel pilotará un Aston Martin de 1922 en Paul Ricard

Vettel es un apasionado de la historia de la Fórmula 1, y en muchas ocasiones lo ha demostrado. Una de ellas fue en el pasado GP de Gran Bretaña, cuando sacó a ‘pasear’ el Williams FW14B –en el que Nigel Mansell fue campeón– que tiene en propiedad.

El caso es que la semana pasada se cumplieron 100 años desde que Aston Martin corrió su primer Gran Premio. Fue en Estrasburgo, Francia, y aunque los dos bólidos de la marca –el TT1 y el TT2– abandonaron la carrera, llegaron a estar en quinta y sexta posición.  

Como no podía ser de otra manera, Aston Martin ha querido rendir homenaje a su propia historia, de modo que Sebastian Vettel se encargará de conducir un TT1 –que se apodó cariñosamente como ‘Green Pea’– en el circuito de Paul Ricard.

"Soy un apasionado de la historia de este deporte, por lo que será muy especial para mí pilotar uno de los coches de Gran Premio originales de 1922 de Aston Martin este fin de semana", ha comentado el tetracampeón de Heppenheim antes del GP de Francia.

Este coche fue el sueño cumplido de los fundadores de Aston Martin –conocida inicialmente como Bamford & Martin–, Lionel Martin y Robert Bamford, quienes tenían la ambición de realizar un bólido para correr en los Grandes Premios.

Fue a principios de los años 20 cuando el conde –y también piloto– Louis Zborowski se presentó en escena y, con un fuerte apoyo económico, puso los medios para que la marca crease los coches.

Al final, las dos unidades creadas –el TT1 y el TT2– debutaron en el Gran Premio de Francia, el 15 de julio de 1922. Al año siguiente, los dos coches oficiales de la marca se pusieron a la venta por problemas económicos y el TT1 fue adquirido por una joven mujer llamada Marion Agnew, quien ‘bautizó’ al coche con el apodo de Green Pea. 100 años después, Sebastian Vettel rendirá homenaje a la marca en Francia.