Toro Rosso optimiza la distribución interna de su box

La fisonomía de los monoplazas cambiará significativamente debido a las modificaciones en el reglamento técnico, lo que a su vez dejará obsoleto parte del equipamiento que el equipo de Faenza utilizaba tanto en los circuitos como en sus viajes por todo el mundo.

Entre las nuevas adquisiciones destacan nuevas carretillas para transportar los neumáticos (que son un 25% más anchos que en 2016) y utillaje para mover los apéndices aerodinámicos del coche y el motor, que será Renault en vez de Ferrari como en 2016. También han comprado nuevas cajas para enviar su chasis, alerones delanteros, fondo plano y llantas por todo el mundo.

En los circuitos, el cambio será especialmente visible en la distribución de su box. Toro Rosso ha priorizado el espacio de trabajo de los ingenieros para que estos no pierdan comodidad en su día a día.

"Los garajes no han cambiado desde el año pasado, pero nuestra disposición ha sido rediseñada para ganar más espacio entre los dos coches para que los mecánicos puedan hacer su trabajo con comodidad", explica la escudería con un comunicado.

Mientras tanto, en la fábrica los mecánicos ensayan la maniobra del cambio de ruedas con los Pirelli P-Zero superanchos que veremos este curso en los circuitos. Toca entrenar para que el aumento de peso no afecte al tiempo total de los pit-stops.