Leclerc explica cómo se gestó su accidente en Interlagos

Ferrari tenía una oportunidad de oro para seguir recortándole puntos a Mercedes de cara al subcampeonato de Constructores. Ni George Russell ni Lewis Hamilton encontraron el ritmo, por lo que se podría haber aprovechado ese segundo puesto en parrilla para ponerlos contra las cuerdas en Las Vegas y Abu Dabi. Sin embargo, no fue posible, aunque los daños se minimizaron con el abandono de Russell. Además, Sainz quedó por delante del heptacampeón. Recortaron puntos, pero menos de los esperados. Así que no es de extrañar la decepción de Leclerc por ese problema de control electrónico. 

Porque ese error provocó que fallase la unidad de potencia y el sistema hidráulico, por eso terminó contra las protecciones. "Fui a la curva, perdí primero la dirección asistida y luego se apagó el motor por razones de seguridad", ha explicado el monegasco, según recoge Autosport. "Y entonces las ruedas traseras se bloquearon, y eso me hizo hacer un trompo”, ha completado en su explicación. 

En un primer momento, él pensó que se trataba de un problema hidráulico, algo que casi descarta después de hablar con los ingenieros. En realidad, "sabemos lo que es, pero no puedo entrar en demasiados detalles", ha asegurado. Quizá lo que más le molesta es que, de no haber sufrido ese problema en la electrónica podía haber continuado en la carrera, con dificultades, pero habría estado. "Sólo se me dañó el alerón delantero", ha recordado. 

"Volví a arrancar, tuve el sistema hidráulico durante 15 segundos. Pero luego pasó exactamente lo mismo. Perdí el sistema hidráulico, y entonces el motor se apagó", ha recordado. Así que su carrera se había terminado definitivamente por ese fallo que, según ha advertido Frédéric Vasseur, no había ocurrido en, al menos, los últimos 10 meses. "Era la primera vez", ha resuelto el jefe de Ferrari. 

Pero, a pesar de eso, para Leclerc es muy frustrante. No ha podido ganar ninguna carrera, algo que sólo ha conseguido su compañero de equipo. Un cúmulo de infortunios ha provocado que, cuando tiene la oportunidad, ocurra algo que le deja fuera o le relega a posiciones más atrás. De hecho, fue lo que él mismo clamó por radio cuando se dio cuenta de que tenía que retirar el coche.

"Quizá sea parte del momento, también estaba muy frustrado", ha explicado sobre su radio al equipo, en la que se lamentaba de su mala suerte. "Estoy molesto porque, obviamente, sobre todo en la segunda parte del año finalmente encontré la confianza con el coche, y luego empiezas segundo, sacrificas todo un fin de semana para la carrera del domingo, haces seis curvas, y eso es todo", ha advertido visiblemente disgustado. 

De todas formas, para él lo primero es continuar con la temporada. Sólo quedan dos citas en el calendario, y las quiere aprovechar. "Pero, por supuesto, es frustrante perder tantas oportunidades a lo largo de la temporada. Sólo espero que después de esta carrera podamos seguir luchando por el subcampeonato de constructores", ha animado a los suyos. Ese es el único objetivo que le motiva de la temporada.

Al menos, se ha consolado pensando que ya no se juega nada. El Mundial está resuelto y él, a nivel individual, salvo superar a Carlos Sainz, tiene pocos objetivos más a la vista. "Prefiero tener muchos problemas en una temporada en la que estoy luchando por estas posiciones, que en una temporada en la que estoy luchando por el campeonato. Dicho esto, preferiría no tener este tipo de problemas en absoluto", ha resuelto al respecto.