La FIA prohíbe las pruebas aerodinámicas para desarrollar los monoplazas de 2026

Esto no significa que ya se haya dado por cerrado el reglamento técnico para el 'cambio de era'. Sin embargo, ya se está dibujando en el horizonte un boceto más que realista de la dirección que se tomará dentro de dos temporadas. Además, el listado de normas deportivas de 2023 también ha sufrido modificaciones una vez ha terminado el campeonato. Así, se ha impuesto la prohibición de los ATR de 2026 del 1 al 31 de diciembre, igual que en el reglamento de 2024.

"Con el fin de evitar pruebas que tengan como objetivo el desarrollo para la temporada 2026, desde el 1/12/2023 hasta el 1/1/2025 inclusive, sólo se podrán realizar RWTT –pruebas restringidas en túnel de viento– utilizando un modelo a escala que cumpla sustancialmente con los reglamentos técnicos de F1 de 2023, 2024 o 2025", dicen ahora estos reglamentos según recoge Autosport.

"Con la excepción de las pruebas de banco de potencia destinadas a desarrollar componentes del sistema de frenos con un mínimo de conductos de aire y siempre que dichas pruebas no prueben simultáneamente –ni proporcionen de ningún modo datos o conocimientos incidentales– el rendimiento o la resistencia de piezas o sistemas clasificados como carrocería. No se podrán realizar pruebas en túnel de viento utilizando geometrías de coches que cumplan parcial o totalmente y/o deriven sustancialmente de borradores y/o versiones publicadas de los reglamentos técnicos de F1 de 2026 o de geometrías y conceptos de carrocería de 2026 propuestos por la FIA", se añade. 

Con un escrito similar, también se prohíbe que se hagan simulaciones CFD de 2026 hasta finales de este año que entra, es decir, hasta los últimos días de 2024. 

Pero los cambios no han finalizado aquí. De igual forma, se ha confirmado la eliminación de la asignación alternativa de neumáticos. Ahora, los días para las pruebas de Pirelli han crecido de 35 a 40. También se ha borrado el requisito fundamental que había para que esas evaluaciones se lleven a cabo sólo entre la primera carrera y el 15 de diciembre.

En las normas está incluido que habrá cuatro días asignados a un proyecto de la FIA que esté relacionado con pruebas de reducción de las salpicaduras. El infructuoso experimento de Silverstone en julio es el punto de salida. 

En otro orden de cosas, se han producido más cambios que también tendrán que ver con el desarrollo de las carreras en sí. Esto significa que el periodo de notificación para una salida parada se ha reducido a sólo un minuto y la apertura del Pit-Lane se reduce a 40 minutos –eran 50– antes de la carrera. De esta forma, se reducen los procedimientos previos a que arranque la acción en un Gran Premio.

En cuanto a las salidas desde el pitlane, los equipos podrán trabajar en el carril rápido "durante un periodo que finalizará 90 segundos después del inicio de la vuelta de formación, tras el cual todo el personal y el equipo deberán abandonar el carril rápido".

Los controles también sufrirán relativas modificaciones después de la clasificación tanto de la carrera como del Sprint. La FIA seleccionará coches específicos y no "al menos tres", como se hacía anteriormente. Además, se ha eliminado uno de los vestigios de la era COVID, cuando las citas se celebraban sin público, en referencia a un evento cerrado.