Hermann Tilke reconoce estar "satisfecho" con el GP de Rusia

Por una parte, un sector amplio de equipos y pilotos subrayó a lo largo del fin de semana su regocijo con las características del circuito, destacando su variedad de curvas y secciones de alta velocidad como alicientes que contribuían a que aumentara la diversión a los mandos de los monoplazas. Además, varios elogios también fueron dirigidos a las edificaciones que sirvieron para albergar hace unos meses los Juegos Olímpicos de Invierno, aprovechadas posteriormente para formar una peculiar perspectiva modernista que rodea la trayectoria del trazado.

La parrilla estaba bien distribuida. Siempre iba alguien más rápido por delante de otro más lento

Por otro lado, lo cierto es que el transcurso monótono que ofreció la carrera del domingo generó un profundo descontento para los aficionados, quienes lamentaban en su mayoría que la similitud del trazado con el Valencia Street Circuit o Yas Marina no otorgara un nivel de espectáculo mayor que del que han ofrecido tales circuitos en las últimas campañas.

Sorprendentemente, la anchura considerable del asfalto de Sochi quedó lejos de facilitar a los pilotos la posibilidad de buscar nuevas trayectorias que les permitieran realizar maniobras de adelantamiento. Justamente al contrario, pues la sucesión de curvas de noventa grados predominante en los dos últimos sectores agrupó a la parrilla en una fila de a uno carente de emoción para los miles de rusos que llenaron las gradas el pasado domingo.

Así, y pese a que muchas de las críticas hacia el estreno descafeinado del GP de Rusia hayan ido dirigidas a la elección conservadora de Pirelli en sus neumáticos, es a Tilke a quien atribuyen muchos aficionados la responsabilidad del limitado espectáculo de la carrera. Por su parte, el germano prefiere mantenerse ajeno a los juicios de la opinión pública, y considera que el evento logró sobreponerse a muchos impedimentos para terminar convirtiéndose en un éxito a nivel global.

“Estoy satisfecho si los espectadores y los pilotos están contentos, y si les ha gustado a los organizadores. Ese es el objetivo. Muchas cosas pueden ir mal. Un circuito nuevo es como un gran prototipo que se prueba por primera vez. Ahí puede pasar de todo. Pero aquí nada se torció desde el jueves”, repasa Tilke en una entrevista concedida a Auto Motor und Sport.

Más allá de asumir la culpa de la monotonía de la prueba, Tilke considera que las diferentes velocidades entre los monoplazas impidieron que se desarrollaran varias batallas entre pilotos, si bien destaca la remontada de Nico Rosberg como uno de los momentos más emocionantes del estreno de la Fórmula 1 sobre suelo ruso.

“La carrera fue buena las tres primeras vueltas. Se vio que también se puede adelantar sin DRS. Pero luego la parrilla estaba tan bien distribuida, que siempre iba alguien más rapído por delante  de otro más lento. Si no ocurre nada representativo, entonces simplemente es así. Pero Nico Rosberg ofreció un gran espectáculo. Y había algunas batallas emocionantes mano a mano. Todo estaba en orden”, ha destacado.

Además, el germano no ha dudado en afirmar que una dotación de neumáticos menos conservadora habría ayudado a aumentar la acción sobre el asfalto: “Obviamente Pirelli trajo neumáticos muy conservadores. Si son algo más valientes con la elección de neumáticos, entonces volverá a ser otra cosa”, indica.

¿Carrera nocturna a partir de 2015?

Una de las propuestas que suenan con más fuerza para adherir un mayor atractivo al Gran Premio de Rusia pasa por que la carrera se dispute de noche a partir de la próxima temporada 2016. Dicha modificación ya ha sido aplicada con éxito al circuito de Sakhir en su edición de 2014, y lo cierto es que constituye una posibilidad que ya ha sido barajada tanto por los organizadores del circuito de Sochi como por Tilke, quien reconoce que todavía se requiere un periodo mayor de tiempo que permita aplicar los cambios necesarios.

Si Pirelli es más valiente en la elección de neumáticos, la carrera volverá a ser otra cosa

“Está previsto, pero no sé si está ya cerrado. Primero tenemos que hacer el concepto. La luz debe ser instalada de tal forma que se sigan viendo los estadios. Los estadios en sí deberían estar más iluminados de lo que están ahora. Eso es para nosotros un proyecto realmente grande”, ha comentado.

De vuelta al presente, el limitado espacio que forma la trazada por la que trascurre la calle de boxes supuso el pasado fin de semana un motivo de suma preocupación entre los equipos, quienes temían que la inclusión al pitlane generara algunos desperfectos en los monoplazas.

Dicha tendencia se une al aprovechamiento extremo del terreno que se ha llevado a cabo en la construcción de un circuito que ocupa literalmente los espacios libres que quedaron vacantes en los alrededores de la sede olímpica.

“Por desgracia, aquí  no hay mucho espacio. En la construcción, debíamos tener en consideración el parque olímpico. Y ahí el espacio era realmente limitado. Y los espacios libres de ahora no eran antes espacios libres. La situación era diferente. Hemos tenido que luchar por cada metro. Ahora la calle de boxes es un poco estrecha. Ya veremos lo que podemos hacer con ella, siempre se puede hacer algo”, comenta.