Test F1 en Barcelona: el halo protector de Ferrari

El Halo que montaba Ferrari no iba anclado al chasis como debería, era simplemente un postizo. Se supone, en cualquier caso, que ha de tener un sistema rápido de retirada del mismo, veremos cómo se define eso exactamente.

Pero vayamos por casos. Este sistema es especialmente bueno protegiendo ante impactos de objetos grandes frontalmente. Es algo muy concreto, y eso tampoco es bueno. En primer lugar, si el objeto no es lo suficientemente grande y no viene de frente completamente, el sistema no lo desviará. Todo objeto más pequeño que las zonas marcadas en azul se “colarán”.

Y ese es otro problema. En las pruebas realizadas, al tratarse de un sistema tan rígido, el objeto que impacte contra él saldrá de nuevo despedido provocando otro posible impacto. En cualquier caso, esto se puede solucionar, un compromiso entre flexibilidad y resistencia siempre es posible.

En un choque en el que un coche se monte sobre el otro, dependiendo de la posición se podría introducir alguna parte en el lateral, pero frenará en gran medida al otro coche. Diremos que la protección en este supuesto es relativamente buena, desde luego mejor que nada.

Sobre la visibilidad, si os fijáis en la siguiente foto –colgada por Craig Scarborough-, no está nada mal. Teniendo en cuenta que lo ha probado Kimi y no se ha quejado de esto, podemos darlo por bueno. Verlo desde fuera duele un poco más, pero es obvio que la estética está muy por debajo de la seguridad.

El mayor problema que yo le veo es la extracción del piloto. Aunque el sistema de anclaje esté muy estudiado, ante un choque como el de Kovalainen en Barcelona 2008, al quedarse clavado en las protecciones el Halo solo dificultaría aún más la extracción. Disipar energía no lo hace, pues como decíamos antes es muy rígido.

Viendo los puntos débiles, se me ocurre que dada la protección limitada ante objetos pequeños, no es del todo necesario algo tan aparatoso. Los dos tubos laterales solo añaden resistencia, cosa que ahora mismo sobra. Por contra, como hemos dicho, es el principal obstáculo para que el piloto salga.

Se me ocurre que salvando el ángulo con las protecciones laterales de la cabeza para que por ejemplo una rueda no entre, se podría prescindir de los tubos. Quedaría algo así como una T, que por supuesto habría que probar su resistencia. Aviso, habría que modificar las dimensiones bastante. Los espejos, bien dimensionados, podrían valer también, creando una zona virtual de seguridad.

Con lo cual, esta opción no mejora ni empeora la protección ante objetos pequeños no frontales. Ante objetos grandes, si se estudia el ángulo con las protecciones laterales –alargándolas hacia delante por ejemplo-, tampoco empeoraría.  Lo mismo sucede con la visibilidad, incluso se puede salir ganando aquí.

Quizá el único punto en el que pierde algún punto es ante el choque de dos coches que se montan uno sobre otro –si es frontal tampoco empeora-, en el que si entrara lateralmente podría no ser tan efectivo al parar al otro coche. De todas formas esto tampoco era un fuerte del Halo.

Lo que sí mejora es la facilidad de extracción del piloto. Si la resistencia es suficiente puede ser una opción muy sólida, pero por supuesto, esto es una idea y nada más, dejemos que el tiempo pase y los equipos desarrollen sus ideas.